- * La actriz ha probado de todo, incluso un tratamiento cosmético que consiste en la picadura de abejas.
La actriz confiesa que en su búsqueda por mantener la belleza de manera natural ha probado de todo. Incluso un tratamiento cosmético que suele ser «muy doloroso».
Aquel viejo dicho que asegura que «quien quiere lucir, tiene que sufrir» nunca tuvo más sentido para la actriz Gwyneth Paltrow.
La estrella, de 43 años, ha creado todo un imperio alrededor del concepto de belleza natural, salud y estilo.
Es bastante común que comparta sus consejos para mantenerse joven y sana en su página web GOOP y en sus libros, por eso no extraña que recientemente confesara en una entrevista con The New York Times que en su búsqueda por mantener su atractivo de manera natural ha probado de todo. Incluso un tratamiento cosmético que consiste en la picadura de abejas.
La actriz de Iron Man admite al diario neoyorquino que como parte de su constante investigación sobre cómo ayudarse a ella y a otros a verse mejor sin la necesidad de usar productos químicos, se ha atrevido a probar fuertes tratamientos naturales.
«Siempre soy el conejillo de indias para probar todo. Por lo general, estoy abierta a nuevas cosas», explica. «Me he dejado picar por abejas. Es un tratamiento milenario que se llama apiterapia.
La gente lo usa para la inflamación y cicatrizaciones. Es en realidad bastante increíble si investigas sobre esto».
No es la primera vez que habla del tema. Ya en 2012 en su blog de GOOP reconoció que había seguido un tratamiento de veneno de abeja para liberarse del dolor de una lesión.
«Recientemente recibí terapia de veneno de abejas para una antigua lesión, y desapareció. Me recomendaron polen de abeja, miel cruda y propóleo para diferentes cosas. Hasta ahora todas estas recomendaciones me han funcionado», escribió en ese momento la actriz.
Y aunque ser picada por abejas no es nada nuevo para la ganadora de un Oscar por «Shakespeare enamorado», admitió que es «muy doloroso». También relata que en su día a día intenta no aplicarse mucho maquillaje.
«Vivir en Los Ángeles me permite estar cerca de la naturaleza», confirma. Y aclara que pasa mucho tiempo nadando o escalando.
«Normalmente sólo me pongo un poco de máscara de pestañas y colorete», dijo.
Por otro lado, también se ha dado a conocer que su divorcio con el vocalista de Coldplay, Chris Martin, está a un papel de finiquitarse.
Según el portal TMZ, la pareja, que en abril de 2015 oficializó su decisión de poner fin a su matrimonio de 10 años, debe sólo firmar un documento que es simplemente una formalidad y que da por terminado su matrimonio. Hasta donde se sabe, la pareja comparte la custodia de sus hijos Apple, de 11 años y Moses, de 9.
