Juan Gabriel GONZÁLEZ CRUZ
- José Hernández, ingeniero de la NASA, de raíces mexicanas, compartió su «Receta de los 5 ingredientes» para amarrar el éxito.
Con una estatua en su honor el astronauta, José Hernández Moreno, quedó inmortalizado en la Plaza Estado de México «Grandes Valores», que ayer fue inaugurada en el municipio de Zinacantepec y en la que quedo grabado un reconocimiento a este destacado ingeniero de la NASA, hijo de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos.
Junto con el gobernador Eruviel Ávila Villegas, Hernández Moreno fue enfático al señalar que si lo quieren poner de ejemplo siempre será como un parámetro de que los sueños sí se pueden alcanzar, por muy lejanos o imposibles que parezcan.
Con una breve pero contundente plática motivacional, José Hernández -quien ya viajó al espacio en una nave estadounidense- dejó a los mexiquenses la llamada «Receta de los cinco Ingredientes» que su papá le puso en la cocina de su casa, cuando de niño le dijo que quería ser astronauta.
«Yo esperaba que me dijera que era yo un muchacho chiflado o que estaba soñando muy grande, que me pusiera a estudiar y es todo… Pero vio la determinación de un niño de 10 años, me llevó a la cocina y me dijo: Yo creo que lo puedes logra, pero tienes que seguir una simple receta de cinco ingredientes».
La receta de los cinco ingredientes para triunfar en la vida:
1.- Decide qué quieres ser cuando seas grande.
2.- Reconoce que tan lejos estás de esa meta.
3.- Crea una ruta y mapa que te va a guiar por toda la vida sin perder la meta.
4.- Educación, no hay sustituto para la preparación.
5.- Reflejar el esfuerzo en el trabajo, siempre entrega más de lo que la gente espera de ti.
Pero a la receta de su papá el hoy surcador del espacio le añadió una sazón especial: la perseverancia.
«Nunca hay que darse por vencidos. Cuando yo inicié el proceso de querer ser astronauta metí mi solicitud y la NASA no me rechazó una, dos o tres veces… me rechazó 11 veces. Fue hasta la 12ª vez que formé parte de la generación 12 de astronautas de la NASA, hay que aprender de nuestras fallas, no tener miedo en fallar porque aprendemos y nos preparamos mejor y lo intentamos de nuevo», agregó.
Finalmente José Hernández, quien dijo que entre sus múltiples galardones y reconocimientos nunca había sido homenajeado con una estatua, reconoció que la nueva Plaza Grandes Valores será una fuente de alimentación a nuestros jóvenes para mantenerlos fuera de las calles, más seguros y hacerles un recordatorio simbólico de que se vale soñar en grande.
