Redacción
El fraccionamiento Dream Lagoons en Apodaca, Nuevo León, se ha visto envuelto en una tragedia que resultó en la muerte de un menor de edad por electrocución en una de las albercas. Este incidente también cobró la vida de un adulto, cuyos detalles aún no han sido confirmados por las autoridades.
El sábado 5 de agosto alrededor de las 19:30 horas, se confirmó el fallecimiento de un joven de 14 años en la alberca del fraccionamiento. Aunque la versión inicial sugirió que el menor murió por la caída de un teléfono celular al agua, posteriormente se descubrió que un adulto, presuntamente el padre del menor, también perdió la vida en circunstancias similares.
Aunque las autoridades del fraccionamiento indicaron que ambas víctimas murieron por la misma razón, los testigos del lugar señalaron que la causa fue un cable suelto en la alberca, contradiciendo la versión oficial. La Agencia Estatal de Investigaciones está llevando a cabo una indagación sobre lo sucedido.
La madre del menor fallecido ha denunciado al fraccionamiento Dream Lagoons y desestimó las explicaciones de las autoridades y del abogado del lugar. Según su testimonio, su hijo murió debido a un cable suelto de las luces nocturnas, que al encenderse provocaron la electrocución. Otros amigos del menor también resultaron afectados por la descarga eléctrica, pero él fue el único que no pudo escapar.
La madre además acusó a los administradores del fraccionamiento de intentar ocultar el incidente y de no permitirle ver lo ocurrido esa noche. Aseguró que el cuerpo del niño fue sacado a través de una tienda de conveniencia debido a que no se le permitió el acceso al Servicio Médico Forense.
