* Frente Ciudadano, más allá del tema electoral, asegura Barrales.
Los partidos integrantes del Frente Ciudadano por México tienen claras sus diferencias ideológicas y no pretenden mimetizarse, sino unirse para construir un nuevo sistema político a partir de un proyecto de país, afirmó la presidenta nacional del PRD, Alejandra Barrales.
En un comunicado, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) informó que su presidenta ratificó que está en juego algo mayor que un tema electoral, pues «nuestro interés se ubica en la construcción de un país y es ahí donde hemos puesto el acento».
El Frente Ciudadano por México, aclaró Barrales Magdaleno, representa la madurez política y, si bien reconoció que los partidos integrantes (PRD, Partido Acción Nacional y Movimiento Ciudadano) no tienen las mismas ideas, sí persiguen los mismos fines.
«Tenemos claro lo que nos une, nos une México» y la defensa de las libertades y los derechos, así como la generación de oportunidades, enfatizó.
No se trata de ganar una elección, sino para construir un gobierno de coalición donde los proyectos de desarrollo cuenten con una base amplia de legitimidad, iniciativas sólidas y el respaldo de la mayoría, que le den certeza y rumbo a México.
Barrales Magdaleno aclaró que hay tres premisas básicas: la corrupción no es cultural; la desigualdad no es natural y la violencia no es inevitable, sino que el gobierno es responsable de resolver los problemas, no de administrar las crisis.
En ese sentido, precisó que no se apuesta por un cambio de partido en el poder, ni de personas en los cargos; nos unen unas causas y el propósito de construir un nuevo régimen, para poner a los ciudadanos en el centro de las decisiones.
Para ello, a nombre del frente planteó sus ejes de trabajo: poner a las personas en el centro de la vida pública; establecer la gobernanza ciudadana e incentivar la movilidad social y la libertad personal; innovar en el combate a la desigualdad y promover el desarrollo humano y la equidad.
La propuesta, aclaró la dirigente perredista, consiste en reanudar la transformación democrática y para ello, hacer de México nuestra casa común.