* IEEM en el ojo del huracán.
* Los cargos con Del Mazo.
Por Julio A. AGUIRRE
No hay nada que desespere tanto como el ver malinterpretados nuestros sentimientos. Jacinto Benavente.
No hay político en el país que no pretenda ser Presidente de México.
Es la aspiración y el sueño de quienes ocupan, aunque mediana e inicialmente, un cargo de servicio público. Aquí aplica la frase el que no vive para servir, no sirve para vivir.
Parece fue ayer cuando alguien me platicó que Eruviel Ávila Villegas terminaría su ciclo como gobernador del Estado de México, y pondría punto final a su carrera….o al menos, aseguraba, no buscaría ir más allá: Ser Presidente del país.
Más sabe el diablo por viejo que por diablo…No lo creí. No lo hubiese creído aún si el propio Ávila Villegas hubiese sido quien me lo dijo.
El servicio público es un «vicio», una «droga» que atrapa. Tan pronto entras en él ya no sales aunque te quieran retirar, aunque uses bastón o silla de ruedas. No está en el presupuesto de político alguno vivir fuera del presupuesto.
No nos extraña lo declarado por el gobernador en turno el pasado fin de semana; es más lo esperábamos, y la fecha ideal será cuando rinda su último Informe de Labores.
Será entonces, apostamos, cuando Ávila Villegas anuncie que buscará ser Presidente de México.
El Viernes a pregunta expresa el mandatario expuso no encartarse ni descartarse -poco original- para buscar la candidatura presidencial del Partido Revolucionario Institucional; eso sí reiteró su respeto a los tiempos y plazas que le marque su instituto político.
Es decir, Eruviel no adelantó la de «8 Columnas», se resguarda para para cuando él decida.
Recientemente señalamos que de querer, quiere, de poder quién sabe. Para 2018 el partido tricolor pensará ¡como nunca!, el nombre de quien tenga alguna posibilidad de conservar -o dar pelea- por el poder Ejecutivo Federal.
Sabido es el divisionismo en pensamiento existente en las filas tricolores. Algunos se aferran al «dedo» mientras otros quieren amputarlo. El que algunos connotados priistas piensen, incluso en ir con un candidato -lo único seguro es que no será candidata- sin ser tricolor muestra el complicado panorama que le espera a quién legítimamente esperan alcanzar el sueño: Ser Presidente de México.
¿Y cómo deja al Estado de México el gobernador Ávila Villegas? «Dejaré una entidad con resultados y fuerte, con crecimiento económico y reducción en los indicadores de pobreza, en marcha y creciendo», dijo.
COMO VA…
Como coheteros… justo a horas de que el Instituto Electoral del Estado de México entregue la constancia que acredita a Alfredo del Mazo Maza como gobernador electo, los partidos, opositores arrecian su inconformidad y anuncian medidas desesperadas para evitar que ello suceda.
Lamentablemente para su causa, hagan lo que hagan de nada valdrá. El mismo día de la elección (4 de junio) en el Edomex, dijimos que palo dado ni Dios lo quita y así será. El partido más difícil de contener sin duda el partido Morena, expertos en descontento y desmadres post electorales. Una vez más, también, los consejeros electorales quedarán en entredicho. Hacer felices a la minoría, e infelices a la mayoría -los que no votaron por la coalición PRI-PVEM-Nueva Alianza-, sigue minando la confianza en las autoridades electorales mexiquenses.
De ocho para arriba… interés ciudadano por saber cuántos muertos arroja cada fin de semana el Estado de México. Lamentablemente la cifra es de ocho -mínimo- para arriba. Incontrolable el baño de sangre, aunque algunos quieran minimizar y maquillar las cifras.
Nadie… bien hará Alfredo del Mazo Maza en no dar trabajo a ningún secretario de la actual administración. La entidad espera otros rostros con renovados deseos de servir. Personajes que pronto se identifiquen con la sociedad y que su gabinete no se vuelva carpa de circo jodido (toda parchada). Continuidad es la palabra.
Tal vez lloré o tal vez reí/ tal vez gané o tal vez perdí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también ame, puedo seguir hasta el final…A mi manerA.
Correo electrónico: aguirre@8columnas.com.mx
