*Oportunismo electoral.
*Hay «cola» en «la panadería».
*»Haiga sido como haiga sido».
Por Julio A. AGUIRRE
El éxito es el único juez terrenal de lo recto y lo equivocado. Adolf Hitler
Cuando se tiene dinero y poder brotan como hongos amigos, compadres y familiares. Esos que antes escondían la cabeza como las avestruces.
Se acabaron -si alguna vez los hubo- principios y valores. Humildad, sinceridad y convicción. La política sigue siendo un juego perverso donde no saben perder ¡y tampoco saben ganar!
Los triunfos electorales, de todos los candidatos y de todos los partidos políticos, casi siempre están manchados por la trampa. Por métodos humillantes y por campañas de lodo. Por la denuncia donde la principal resulta la corrupción. Hay amenazas, secuestros, agresiones, heridos y muertos.
El Partido Acción Nacional (PAN), tras los resultados del pasado domingo, vive hoy momentos de euforia. Siguen bailando, cantando y no pocos chupando. Bendita victoria. Nada se compara. El triunfo es poder, el éxito significa dinero, el cargo es impunidad.
Recibir una constancia de mayoría que te avala como alcalde o gobernador es igual a recibir carta abierta para que hagas lo que te de la regalada gana. ¡Bendito fuero! ¡Maldito fuero!
De pronto el Comité Ejecutivo Nacional blanquiazul se volvió la «pastelería» más frecuentada.
Hoy se ve activos militantes que antes de la jornada estaban escondidos, avergonzados de lo que era; la concha, la oreja y la hojaldra entre otros, estaba duro como una piedra. No se paraban ni las moscas y el negocio iba a pique.
En estos momentos hacen su aparición y todos vuelven a ser dueños de las principales planas, micrófonos y espacios televisivos personajes como Vicente Fox Quesada, Santiago Creel, Josefina Vázquez Mota, entre otros.
Oportunismo en toda la extensión de la palabra. El triunfo tiene muchos padres, recuerden.
El mismo ex presidente Vicente Fox, hablando maravillas del que fue su partido -hoy vuelve a ponerse la camiseta blanquiazul, olvidando la tricolor (PRI)-. Recordemos que el ranchero enamorado se inclinó, en su momento, por el Partido Revolucionario Institucional.
Es el mismo Chente que luego de aplastar víboras prietas y tepocatas las levantó y las cuidó. El ex presidente se atrevió a señalar que el PAN ya tiene candidato para la elección de 2018. No es candidato, es candidata: Margarita Zavala.
Ciertamente la esposa de otro ex presidente de México -Felipe Calderón Hinojosa- tiene cualidades y simpatía de mexicanos; coincidimos con Fox que podría alcanzar la silla presidencial.
Margarita es una mujer inteligente por lo mismo debe reconocer y entender que la ayuda de su esposo, y ahora de Vicente Fox, podrían truncar su camino hacia Los Pinos.
Si Felipe y Vicente desean que logre el triunfo en 2018, el verdadero apoyo será que se alejen lo más que puedan.
LOS «JODIDOS»
Lo único bueno de equivocarse es la alegría que produce a los de más. Anónimo.
En el Partido Revolucionario Institucional el panorama es distinto. El Poder Ejecutivo Federal es de ellos y aunque muchos los ven fuera de Los Pinos (un servidor entre ellos) debemos entender que del plato a la boca se cae la sopa.
Pocos creían que Acción Nacional daría la campanada al ganar siete de 12 gubernaturas en juego. Hoy Acción Nacional piensa que la posibilidad de volver a sentarse en la silla presidencial es gigantesca, y tampoco es así.
Hemos sido testigos de cómo el «moribundo» se levanta, baila y canta. México ha sido testigo de cómo el «casi» presidente termina borrado.
La nefasta guerra sucia vista el 5 de junio del 2016 debemos entenderla como un pequeño avance de la madre de todas las guerras que sufriremos en el 2018.
¿Están pensando los partidos políticos más significativos en el tipo de propuestas que harán para ganarse la confianza y el sufragio? ¡Ni madres! Están engordando archivos con antecedentes de todos los posibles enemigos -candidatos- para hundirlos. Me quito el nombre y el apellido si me equivoco.
Mi terquedad, infinitamente mayor a mi capacidad, me dice que en 2017 la gubernatura mexiquense, con el candidato que sea, está firme.
Misma testarudez me dice que en 2018 la presidencia de la República hoy más que nunca pende de un hilo.
Tal vez lloré o tal vez reí/ tal vez gané o tal vez perdí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también ame, puedo seguir hasta el final…A mi manerA.
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