* Córdova Vianello rechaza que malestar
y desconfianza deriven de comicios.
El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, consideró que el malestar y la desconfianza que se expresan en el debate postelectoral no son producto de las elecciones, sino de problemas estructurales.
En la inauguración del Foro Diálogos para una Capital Cívica, organizado por el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) y el INE, opinó que el país está en «un momento muy delicado» de cara a las elecciones de 2018. Sin embargo, sostuvo que el escenario de malestar se debe a problemas como corrupción, pobreza, desigualdad, impunidad e inseguridad, «derivados de políticas públicas equivocadas», no a las elecciones del 4 de junio pasado en Coahuila, Estado de México, Nayarit y Veracruz.
«Es imposible que ese problema de cultura cívica, de desconfianza, se resuelva solamente a partir de la actuación de las autoridades electorales nacional y locales», dijo ante autoridades gubernamentales, electorales y jurisdiccionales de la Ciudad de México.
Incluso descartó que esa desconfianza pueda resolverse «ni siquiera de aquí a 2023, que es la fecha hasta donde la Estrategia Nacional de Cultura Cívica (ENCCÍVICA) se plantea».
La ENCCÍVICA se expone desde un enfoque de política pública y es necesario que alcance ese carácter, «a fin de delinear los grandes ejes sobre los que queremos avanzar», enfatizó el titular del INE.
Alertó que eso supone el resultado de «un diálogo incluyente, amplio, entre ciudadanos, autoridades electorales, instituciones de gobierno federal y locales, universidades, organizaciones de la sociedad civil, medios de comunicación».
Por ello, recalcó que «si no cumplimos con nuestra responsabilidad difícilmente lograremos salir del bache en el que hoy lamentablemente se encuentra nuestra democracia».
Por su parte, el presidente de la Comisión de Organización Electoral del INE, Marco Antonio Baños, planteó que con ENCCÍVICA se pretende que exista información que permita la evaluación de los servidores públicos, y «la posibilidad de que se puedan exigir las responsabilidades que cada quien tiene».