REDACCIÓN
El Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes inició hoy la tercera audiencia pública en el marco de las investigaciones que podrían derivar en un juicio político contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la que testifican cuatro funcionarios estadunidenses.
Tres funcionarios de los que testifican este martes estuvieron presentes cuando se realizó la llamada telefónica entre Trump y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, el 25 de julio pasado, y cuya revelación dio inicio al proceso de juicio político o impeachment contra el mandatario estadunidense.
La audiencia comenzó con el testimonio del teniente coronel Alexander Vindman, el principal experto en Ucrania del Consejo de Seguridad Nacional, y Jennifer Williams, asistente del vicepresidente estadunidense Mike Pence.
Luego rendirán testimonio el exenviado especial de Estados Unidos a Ucrania, Kurt Volker, y el asistente del Consejo de Seguridad Nacional, Tim Morrison. De los cuatro testigos: Williams, Vindman y Morrison escucharon la llamada del presidente Trump del 25 de julio pasado.
Se prevé que el testimonio de Williams coloque a Pence en el centro de atención, ya que el vicepresidente ha defendido las acciones de Trump en el caso Ucracia.
En declaraciones anteriores, en su audiencia privada en la Cámara de Representantes, Williams consideró como “inusual la llamada telefónica del 25 de julio porque, en contraste con otras llamadas presidenciales que había observado, involucraba la discusión de lo que parecía ser un asunto político interno», publicó la cadena informativa CNN.
También en su audiencia privada, Williams describió las conversaciones de Pence con Zelenski, que tuvieron lugar mientras Trump y un grupo de diplomáticos de confianza estaban presionando para que se investigara al ex vicepresidente estadunidense Joe Biden, considerado como el principal rival político de Trump rumbo a las elecciones presidenciales de 2020.
La asistente mencionó que Zelenski le preguntó a Pence sobre los 391 millones de dólares en asistencia militar estadunidense para Ucrania durante su reunión del 1 de septiembre al margen de un evento en Polonia, entre otras cosas.
Mientras que Vindman, quien se presentó a la audiencia de este martes vestido con su uniforme militar, indicó que «estaba preocupado por la llamada, lo que escuché fue inapropiado”.
En su audiencia privada, Vidman señaló que la «disparidad de poder entre el presidente de Estados Unidos y el de Ucrania es enorme”, y la llamada se convirtió en intercambio, en el que se trataba de conseguir una reunión en la Casa Blanca.
La declaración de este martes de Vindman se da luego que expresó su preocupación por la seguridad de su familia.
El Ejército ha estado tomando medidas para la seguridad de la familia Vindam, como supervisar su residencia y revisar las computadoras.
