REDACCIÓN
El colectivo Mujeres Feministas Víctimas del 25 de noviembre denunció que el pasado martes sufrieron acoso policial en algunos de sus hogares e intentos de hackeos en sus cuentas de redes sociales virtuales.
“No callaremos ante sus amenazas e intimidaciones, hacemos responsable al Estado de cualquier incidente que nos pueda suceder”, señala el colectivo en un comunicado.
“El martes intentaron hackear nuestras cuentas y con patrullas afuera de las casas de algunas compañeras. Cada una de nosotras decidirá si interponer denuncias legales hasta la difusión independiente de lo sucedida”, expresaron.
En lunes, previo a la marcha en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, fueron detenidas siete mujeres, entre ellas una menor de edad, por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
La detención, según la versión oficial, fue por tener objetos punzocortantes (tijeras, cutters), latas de pintura en aerosol y palos que podrían poner en riesgo a más personas.
La versión del colectivo fue que a las 17:40 horas, sobre la calle 58-A, se vieron rodeadas por policías estatales.
Eran 11 mujeres que se sintieron intimidadas por cuatro patrullas y 30 policías, por lo tanto decidieron resguardarse en un negocio de impresiones, según la queja.
Intentaron grabar las agresiones desde sus celulares y publicaron videos en vivo; los policías se agrupaban fuera del establecimiento. Les arrebataron mochilas, carteras y celulares, además de que las obligaron a entrar a redes sociales y borrar los videos subidos.
“La policía intentó en todo momento evitar ser grabados y borrar evidencia de los testigos que se encontraban presenciando las agresiones verbales y físicas. Nos obligaron a proporcionar nuestras contraseñas de celulares y entraron a revisar nuestros perfiles en redes sociales”, denunciaron.
Al ingresar, fue cuando procedieron con la detención arbitraria –sin elementos en flagrancia ni orden judicial– de las siete mujeres.
“Repudiamos el abuso de autoridad de las fuerzas estatales de la SSP, la omisión del Estado”, manifestaron.
Denunciaron que las detenidas fueron incomunicadas por tres horas y torturadas, lo cual viola con los protocolos de detención y sus derechos humanos.
También consideraron “indignante que medios comprados por el Estado mientan, oculten y minimicen que las yucatecas también tenemos participación activa”.
