“Nunca una noche ha vencido al amanecer,
Ni nunca un problema, ha vencido a la esperanza.” Bern Williams.
Un pasaje bíblico dice “la carrera no la gana el mas ágil, ni la batalla el más fuerte”. En teoría de guerra, el éxito de toda batalla reside en el diseño de un proceso que mantenga equilibrio entre los fines, metidos y los medios disponibles, identificación de objetos y habilidad para conseguirlos; es decir, contar con una estrategia.
Hoy el mundo se encuentra en una guerra ante esta pandemia, el éxito para superar esta compleja batalla dependerá en gran medida de la eficacia para diseñar e implementar la estrategia sanitaria y economía política, pero en esta columna quiero enfocarme mas en el tema económico.
El escenario no podría ser más complejo, las evidentes perdidas en los mercados de capitales, la caída del precio del petróleo, la perdida de empleos, el recorte de salarios y la contracción de la demanda de bienes y servicios, traerán como consecuencia una variación anual del PIB negativa durante más de dos trimestres consecutivos, es decir, una recesión económica.
Bancos mundiales anticipan que la actividad productiva en México, medida mediante el PIB, llegará a descender posiblemente hasta 6.0% este año. De ser así, México se estaría encaminando a la recesión económica más larga de los últimos 90 años, siendo que desde la recesión de 1920 a 1930 no se registraba el panorama que ha traído el coronavirus.
Las acciones en materia económica que tienen que emprender los países, necesitan partir de un diagnostico certero de la realidad, en México la realidad es muy distinta a la de los países desarrollados, ya que nuestro país depende en gran medida del sector informal, según datos del INEGI más de la mitad de los trabajadores (57%) se encuentran laborando dentro del sector informal, generando el 22.7 % del PIB.
Ante este panorama, la economía nacional, requiere de la implementación de una estrategia de acción, prevención y contención eficiente y coordinado, en el cual se proteja a todos los sectores.
Es fundamental contar con una política monetaria estratégica y una flexibilidad tributaria que busque proteger los empleos, a las industrias, al empleador, y sobre todo, a los comerciantes informales. Millones de mexicanas y mexicanos viven al día en nuestro país, sin acceso a seguridad social, este sector debe ser una prioridad del Estado en las medidas económicas a realizar.
Por ultimo, mi reconocimiento y admiración a los profesionales de la salud, quienes día con día con su arduo trabajo hacen que el país continúe en marcha y en pie de guerra ante la pandemia. A todos ustedes muchas gracias,
¡Ánimo!
Una vez más los mexicanos saldremos adelante.
Pedro Haces Lago.