POR Hugo Mauricio GARCÍA
«Cuando no somos capaces ya de cambiar una situación, nos enfrentamos al reto de cambiar nosotros mismos»
-Viktor Frankl
Cuenta la historia, que los papas de Luis no saben a qué hora nació, si el lugar, si el día, pero el horario, es hasta el día de hoy una incógnita, vivió sus primero años en un departamento pequeño, fue el segundo de una familia que finalmente tendría 4 hijos.
De su primera infancia, esa que dice Freud que marca el destino de los seres humanos, no tiene memoria de nada si acaso un pálido recuerdo del multifamiliar donde vivió, lomas de plateros en la ciudad de Mexico.
De su segunda infancia, adolescencia y hasta que salió de su casa a los 19 años, aprendió y se enquisto en su alma una idea, un habito, una forma de vida: la carencia.
Cuanto dolor, cuanta mediocridad, cuanta apariencia, cuantas mentiras, cuanta desconfianza, cuanto desconocimiento de su propia valoración tuvo que pasar para que Luis entendiera que el cambio no venía de fuera, debía ser interno.
Después de muchos años de estudiar, un día, de esos de los que no se esperan mucho, de esos que parecen un copia de calca el uno del otro, sin grandes esperanzas, pero tampoco sin grandes peligros, un buen hombre cuyo nombre, nuestro amigo luis no recuerda, le dio 2 claves para entender todo aquello que había estudiado y de lo cual ya era experto, al menos en la palabra.
FE, – le dijo el hombre
Yo tengo fe-contesto Luis
-Estas confundido, lo que tú tienes es arrogancia, soberbia, crees que el conocimiento que haz absorbido es suficiente para lograr un cambio en tu vida y sin embargo, nada haz logrado, ciertos destellos si acaso.
-Entonces, ¿dime que es la FE?
-La FE es la certeza de que siempre hemos estado, siempre hemos existido y por lo tanto nuestros pensamientos, también siempre han estado y si siempre han estado quiere decir, que esos pensamientos nos pertenece, no solo aquellos que nos heredaron como formas autolimitantes de desarrollo, sino esos que nos hablan de perfección y abundancia y como este mundo es efecto de una imaginación ilimitada, la FE nos dice que nuestros pensamientos son la causa y el mundo que creamos con ellos son el efecto, así que si quieres cambiar tu realidad física cambia tus pensamientos pero a través de la FE.
Muy bien-dijo Luis- Fe es la primera llave y ¿la segunda?
ACCION, ya se que me dirás que tu siempre estás en acción y que trabajas y que no te detienes, pero la acción a la que me refiero es la basada en la FE, es decir debes actuar como si aquello en lo crees a través de la FE ya fuera una realidad.
Habla, vístete, actúa, crea al personaje exitoso que vislumbras a través de la FE.
Y así, con la FE como armadura y la acción como espada, Luis libró duras batallas, no solo contra la carencia, sino contra un enemigo de mayor envergadura, su sistema de creencias.
No fue fácil ni instantáneo, afortunadamente luis ya poseía otra arma poderosa que potenciaba aquellas que recibió del misterioso hombre, DISCIPLINA.
Y esta historia continua, porque Luis eres tu y tu y tu, puede ser una luisa también, es una historia que no tiene fin,
Hoy ya tienes 3 herramientas, que debes aprender a utilizar, para tus sueños lograr
Fe, acción y disciplina
cierro mencionando aquella frase de Madame de Stael una escritora, filósofa y tertuliana francesa de origen ginebrino que hoy parafraseo.
- La mayor felicidad consiste en transformar los sentimientos, y digo yo en transformar disciplinadamente la fe en acción
Encuéntrame en Facebook como Hugo Garcia.
Abrazos, ¡todos!