ZONA DIVERSA POR LEO ESPINOZA
¿A quién culpar de la violencia en México?
Mucho nos escandaliza lo ocurrido en el conflicto de Rusia y Ucrania, todos los días se pueden ver declaraciones en medios digitales, impresos y redes sociales condenando las bajas de ambos lados, donde el origen del conflicto fue no aceptar las diferencias de dos países que fueron uno y que prefieren matarse entre sí que abrazar las diferentes visiones de dos culturas que quieran o no están marcadas por la historia en común y por una herencia cultural que de eliminarse tardara muchas generaciones posteriores.
En nuestro país, llevamos años bajo el yugo de la violencia, se pudieran señalar varias fuentes, al gobierno en turno, al narcotráfico, al patriarcado, al futbol, la religión, incluso los videojuegos, música, o contenido de TV y plataformas digitales, pero la cruda verdad es que los mexicanos atacan a los mexicanos.
México cerró su cifra de homicidios con 33,308 casos en el 2021 y aunque hubo una baja con respecto al 2020 es desalentador ver tanta muerte que ni países en conflictos bélicos los tiene. Aunque ya hay una herramienta de diagnóstico social para medir las diferencias como es la ENADIS (Encuesta Nacional sobre Discriminación) de poco o nada servirá si quien dirige al país no presta atención del cómo prevenir y combatir al México violento en el que vivimos.
En nuestra nación los resultados que arrojan sobre segregación son contundentes, personas con color de piel morena, indígenas, mujeres, comunidad LGBTTTIQ+ y personas en situación de pobreza son las más atacadas y discriminadas.
No es de asombrarse que en un país desigual, con leyes desiguales sea el caldo de cultivo para que en donde se tiene menos oportunidades sea blanco fácil del narcotráfico y de la delincuencia, pero no solo es culpa de los sectores menos favorecidos, pues también la corrupción en México es detonante y comparsa de que lleguemos a estos niveles de muerte e impunidad.
Hoy en día pareciera que la panacea de los gobiernos actuales y si de todos, no importando su color es realizar eventitos con bombo y platillo conmemorando cada día de lucha social, en los que por unos breves momentos parecieren cercanos al pueblo y a sus necesidades, firman convenios, prometen políticas públicas y visten colores alusivos con los que se identifica la sociedad civil.
Violencia genera más violencia y esa es una máxima, la crítica y el escrutinio, así como la reflexión es obligada pero lo poco o mucho que podamos hacer desde nuestra trinchera aunque abona no cambiaran a nuestro México al corto o mediano plazo. La historia nos demuestra que la desigualdad se combate con igualdad y hasta que las leyes y las condiciones estén parejas para todas, todos y todes podremos hacer un cambio en lo individual y en lo colectivo, y no, no es regla pero sin cimientos fuertes e instituciones fuertes que puedan y sepan realizar su trabajo no hay forma de construir una sociedad mas segura.
¡Nos leemos la próxima semana querido lector un abrazo!
Leo Espinoza, abogado, activista, conductor, político y orgullosamente gay.
