Guadalupe de la Cruz
Con la llegada del Covid-19, muchas enfermedades en México se dispararon debido a que se dejaron de lado los cuidados y tratamientos, pues había que hacerle frente a un virus nuevo y desconocido.
La pandemia agarró al mundo entero por sorpresa y obligó a los gobiernos y trabajadores de la salud a buscar soluciones (vacuna) para hacerle frente a la nueva cepa.
Con el paso de los días y de los meses, al estar el SARS-CoV-2 entre los seres humanos, el virus empezó a cobrar la vida de personas adultas principalmente, sin que nada ni nadie pudiera frenarlo, sólo la vacuna que llegó un años después.
También provocó que las enfermedades crónico-degenerativas crecieran de forma alarmante entre la población, así como que aparecieran más padecimientos y que todos los sectores resultaron afectados entre ellos el infantil.
MENORES
Los infantes son un sector vulnerable para contraer diversas enfermedades, y más aún cuando la pandemia ha dejado entre ellos malos hábitos alimenticios y falta de actividad física, provocando sobrepeso, obesidad, diabetes infantil, así como hepatitis A o B.
Este último padecimiento en la entidad mexiquense no ha sido tan alarmante, y aun cuando siempre ha existido, se han contabilizado hasta el mes de junio 20 casos y desafortunadamente un fallecimiento, información que fue dado a conocer por la autoridad de salud estatal.
HEPATITIS A
Hasta el 19 de junio, el Estado de México habría registrado 20 casos de Hepatitis A, así como un fallecimiento por esta causa, Víctor Durán Mendieta, subdirector de Epidemiología del ISEM dijo que la situación no es alarmante; además descartó algún caso de Hepatitis aguda y grave de causa desconocida.
El funcionario estatal indicó que a la fecha se han estudiado 20 posibles casos de menores de 16 años a los que se les aplicaron pruebas y resultaron positivo al virus de Hepatitis A.
Sin embargo, dijo que de los 20 casos se descarta que tengan una Hepatitis aguda y grave de causa desconocida, que provocó la alerta epidemiológica en el mundo.
Durán Mendieta, finalizó diciendo que los casos registrados al momento y el mismo fallecimiento forman parte de la casuística de la hepatitis fulminante que no es nueva y se presenta históricamente en niños y adolescentes.
PEDIATRA
Jean Terry Cambrone, medico pediatra dijo que la hepatitis infantil es una enfermedad que siempre ha existido y no es otra cosa que una inflamación del hígado, la cual, es producida por un virus denominado hepatitis A, hepatitis B o hepatitis C, este último es contagiosa cuando es causado por un tóxico que sea alcohol, droga o cualquier otra cosa, pero está no corresponde a los niños.
Pero en el caso de la hepatitis A, es un virus que vive en las “heces” por lo tanto podemos deducir que la forma como se transmite esta infección es a través de alimentos contaminados cuando no se lavan bien las frutas y verduras, o cuando se consumen mariscos crudos y otros alimentos, que pueden estar contaminados con “heces” humanos.
TRANSMISIÒN
El doctor Terry refirió que la transmisión de la hepatitis A es vía oral, por lo tanto, una vez que el paciente ya esta contagiado con el virus se manifestará de dos formas: primero pueden aparecer síntomas generales como fiebre, cansancio, falta de apetito, malestar general y otros casos se aprecia un color amarillo de la piel y de los ojos, la popo se hace blanca y la orina se hace oscura, estos son datos claves en el diagnóstico de una hepatitis A.
Por lo que si se sospecha que el menor pudiera tener hepatitis obviamente se debe acudir al médico para que sea valorado y se le realicen exámenes de sangre para corroborar que sí sea hepatitis y saber que tan dañado está el hígado del infante.
TRATAMIENTO
El especialista en pediatría indicó que el tratamiento es sencillo, son muy pocas veces que el niño requiere ser hospitalizado por esta causa, ya que generalmente se lleva el tratamiento en casa y consiste en verificar primero los síntomas como: dolor, fiebre, vómito y el médico se emite de acuerdo con los exámenes, el médico podrá indicarle un antiviral.
Pero lo más importante, dijo el doctor Terry, es la prevención y afortunadamente los dos tipos de hepatitis que le dan en los niños sea la A o B, se pueden prevenir con vacunas.
Pero vale recordar que la hepatitis B se transmite a través de fluidos corporales, “una vía muy importante de transmisión es a través de las madres en el momento del parto, ya que en ese momento puede contagiar a sus hijos de hepatitis B.
VACUNACIÒN
La vacuna contra la hepatitis B se aplica desde los dos meses, a los 4 y 6 meses de edad del menor, mientras que la dosis contra la hepatitis A se aplica a partir del primer año de vida del menor.
Pero hay que ser enfáticos en que ambas hepatitis no es una enfermedad grave, en pocas veces deja secuelas en el hígado, pero por lo regular a los niños les va muy bien y la pueden superar.