Guadalupe de la Cruz
Entre las tradiciones que distinguen a México de otros países son las que están llenas de color, olor y cultura, como la celebración de Día de Muertos donde familias enteras elaboran grandes altares, colocan flores, comida, veladoras, copal con el objetivo de honrar a sus seres queridos que han partido a otra vida.
Hay quienes aseguran que los difuntos pasan a otro plano, o están dormidos -hasta que sea el juicio final- o simplemente siguen recogiendo sus pasos, pero la gran mayoría coincide en que sus familiares regresan a visitarnos, por lo que la preparación para hacer de ese momento un dia especial, es todo un ritual.
VIRUS
Pero desde hace dos años, muchas personas murieron víctimas de un desconocido y letal virus que tomó por sorpresa a miles de mexicanos, quienes, al enfrentar al coronavirus perdieron la batalla, y desde el 2020 a la fecha el dolor de la pérdida de un ser querido sigue presente en las familias mexiquenses.
Mientras que otros perdieron la vida de manera trágica, en hospitales, con dolores, en la calle, en su domicilio e incluso antes de nacer; pero todos ellos merecen ser recordados, el primero y dos de noviembre.
HISTORIA
Sin embargo, cuenta la historia que la preparación del camino para la llegada de los difuntos a la tierra comienzan a partir del 29 de septiembre, día de San Miguel Arcángel, por lo que muchos creyentes realizan la primera ofrenda para sus difuntos; de igual forma visten con pétalos de flor de cempasúchil las tumbas de los fallecidos.
La segunda ofrenda, aseguran, se realiza el 18 de octubre, día de San Lucas, donde se aprovecha para pedir al creador que se dé permiso a quienes murieron en desgracia, con violencia, traicionados, o que hubieran cometido alguna falta, regresar a visitar a los suyos.
Posteriormente el 28 de octubre, día de San Judas Tadeo, es cuando se empiezan a realizar las compras de veladoras, para ofrendar a este santo, además se inician los preparativos de la fiesta de Día de Muertos.
Asimismo el 30 de octubre se prepara todo para la celebración que está en víspera de iniciar, por lo que muchos ya elaboran el altar para sus familiares, así como la comida, flores, bebidas, y las fotografías que serán parte de dicho altar.
TRADICIÓN
Y así, el 31 de octubre inicia la fiesta de los fieles difuntos con las ofrendas dispuestas para los niños y angelitos, se hace el camino con pétalos de flor de muerto para que puedan llegar hasta el lugar que se les ha preparado.
El 1 de noviembre es el día de Todos Santos o de los niños, porque los pequeños que han muerto se cree que no tienen ningún pecado y se considera que son santos. Se colocan en el altar tamales de dulce, golosinas, chocolate, pan y fruta, alimentos que se ofrecen a los visitantes.
El día 2 de noviembre es día de los Fieles Difuntos, es una celebración grande y en el altar se colocan tamales de chile, bebidas que gustaban a los adultos, frutas, pan, cigarros y ofrendas diversas.
COSTUMBRES
En municipios del Valle de Toluca la mayoría de los habitantes tienen como costumbre acudir los días 1 y 2 de noviembre acudir al cementerio a velar por una noche completa a sus seres queridos que han regresado a visitarlos, y deben acompañarlos.
Enriqueta, originaria del municipio de Toluca y vecina del Seminario indicio que como cada año -ella y su familia- se preparan para recibir a sus difuntos, “este año será muy difícil, pues además de recordar en esta fecha a mi padre y a mi hermana que murieron hace más de 10 años, también recordaremos a mi hermano, que perdió la batalla contra el Covid”.
Tenemos un dolor más a cuesta, dijo, una de mis hermanas intentó suicidarse hace un mes, desde las pérdidas de nuestros familiares, sus problemas psicológicos aumentaron.
Queta -como la llaman de cariño- asegura que desde el 29 de septiembre comienzan los preparativos de la celebración y asegura concluyen el 30 noviembre, día de San Andrés “ese día que se despide a los muertos con la última ofrenda y el levantamiento del arco”.
VENTAS
Para la preparación de la celebración de todos los santos, se tiene que adquirir los productos a utilizar y es ahí donde la mayoría de las familias tiene que buscar ofertas, comparar precios y elegir los que están acorde a su presupuesto.
La venta de los productos tienden a subir y ser un poco más caros que en días normales, por lo que hay quienes previendo dichos aumentos deciden empezar a comprar productos no perecederos como las veladoras, chocolate, chiles, harina, entre otros.
La señora Irma, vecina de Metepec señaló que los precios han subido en todos los productos, pero sin duda en los que se utilizaran para adornar los altares serán más notorios, “por lo que yo empiezo a adquirir algunas cosas desde antes para evitar sorpresas económicas”.
“Pero con el alza de los precios, cada vez se hace más difícil poder colocar todos los elementos que forman parte del altar, sin embargo lo que cuenta es la intención no no olvidar a nuestros difuntos”.
COMERCIANTES
El otro lado de la moneda, quienes esperan esta época y otras fechas son los comerciantes de flores, quien aseguran que dos años atrás las ventas cayeron hasta en 100 por ciento, pues debido a la pandemia no se pudieron realizar celebraciones, ya que se evitaron las aglomeraciones en todas partes y los panteones el principal punto.
El señor Miguel, originario del municipio de Atlacomulco dijo que es comerciante de flores pero no productor, “nosotros compramos el producto a quienes trabajan en el invernaderos, quienes además nos han comentado que debido a la falta de lluvia este año ha sido un poco difícil el cultivo de la flor”.
Situación que ha propiciado que el precio del producto se incremente un tanto por la falta de agua de lluvia y otro por los insumos que se gastan para que las flor llegue con bien a su destino y pueda ser comercializada entre la población.
“A nosotros nos suben los precios al adquirir la flor, por lo que debemos también recuperar nuestra inversión y obtener un poco de ganancia, sabemos que la economía no está bien para nadie, pero todos tenemos que hacer lo necesario para llevar el sustento a nuestros hogares”, indicó.
Por ejemplo, dijo, las flores que se venden en esos días son de cempasúchil, de mano de león, nube, las cuales, suben hasta en un 50 por ciento para los comerciantes y de ahí hay que incrementar el costo para los consumidores que depositan sus flores en las tumba de sus seres queridos.
Cabe mencionar que los comerciantes de flores provenientes de Atlacomulco y Tenancingo han mencionado que la flor está subiendo de precio, por lo que se ven en la necesidad de incrementar la venta al público, tratando de recuperar sus ganancias, aunque aseguran que este año se visualiza positivo a los dos años anteriores.