Guadalupe de la Cruz
Este 2022, de nueva cuenta las familias mexiquenses regresaron a los panteones a velar a sus muertitos, luego de que la pandemia de Covid-19 originó que por dos años los festejos se realizarán solo en casa.
A la luz de las velas y con música de mariachi cientos de personas acudieron a recibir a sus familiares, que por diversas razones, se adelantaron en el camino hacia otro plano, pero la alegría de saber que han regresado, los llevo a esperarlos en el camposanto.
Flores, veladoras, comida, dulces, globos, alcohol, chocolate y diversos alimentos fueron las piezas que adornaron las tumbas de los difuntos que descansan en paz y duermen el sueño eterno; principalmente se podían observar adornos para los más pequeños.
La historia y cultura de los mexiquenses relata que el primero de noviembre regresan los niños, los bebés que sin pecado alguno fallecieron por alguna causa y ese día los deudos llevan dulces, globos y juguetes en honor a sus pequeños difuntos, por lo que llaman también el día de todos los santos.
Posteriormente el 2 de noviembre se celebra a los fieles difuntos, que son las personas adultas que también por diversas razones se adelantaron en el camino y trascendieron a otro plano.
Cabe mencionar que en el municipio de Chapultepec se pudo observar en los diversos cementerios, familias completas que acompañados de mariachis, comida, cerveza y un gran ánimo acudieron a recibir a los muertos en su día.