Redacción
Jim Otto, leyenda de los Raiders y miembro del Salón de la Fama desde 1980, ha fallecido a los 86 años. Su pérdida deja un vacío en la familia Raider, quienes destacan su liderazgo y tenacidad como elementos distintivos de los equipos dominantes de las décadas pasadas. Originario de la Universidad de Miami, Otto estableció un récord impresionante de 210 partidos consecutivos durante la temporada regular, demostrando su compromiso inquebrantable con el juego.
Este récord se extiende a 308 partidos consecutivos si se incluyen los juegos de playoffs y Pro Bowls. John Madden, fallecido en 2021, lo describió como el prototipo del jugador de fútbol americano, destacando su influencia en el deporte. Los números de Otto respaldan esta afirmación, con siete títulos divisionales, un campeonato de la AFL, y múltiples selecciones All-Pro y apariciones en el Pro Bowl.
Además, fue parte del equipo de todos los tiempos de la NFL 100. A lo largo de su carrera, Otto sufrió numerosas lesiones, lo que se refleja en las 38 cirugías que tuvo que enfrentar, siendo 28 de ellas en las rodillas. Su autobiografía, titulada ‘Jim Otto: The Pain of Glory’, relata estas experiencias, mostrando la dureza física y mental requerida en el fútbol americano profesional.
Phil Villapiano, excompañero de equipo, lo recordó como un líder indiscutible y el rostro de los Oakland Raiders durante mucho tiempo. Las condolencias también llegaron de Maxx Crosby, una estrella defensiva actual de Las Vegas Raiders, destacando el impacto perdurable de Otto en la franquicia y en el deporte en general. Su legado como jugador y como figura emblemática de los Raiders perdurará en la memoria de los aficionados y en la historia del fútbol americano.