Redacción
La administración de Donald Trump sigue adelante con el plan de imponer aranceles del 25% a las importaciones de México y Canadá el sábado 1 de febrero. Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, confirmó que la fecha para la implementación de la medida no ha cambiado, señalando que esta decisión forma parte de las prioridades del presidente para abordar temas de inmigración y tráfico de drogas.
Leavitt explicó que el presidente considera los aranceles no solo como una herramienta económica, sino también como un mecanismo para presionar a los países a implementar acciones específicas. Aunque evitó detallar si Canadá ha cumplido con los requisitos planteados por Trump, reiteró que la fecha del 1 de febrero sigue en la agenda presidencial tras una conversación directa con el mandatario.
El anuncio ha generado incertidumbre en los mercados, especialmente en el comportamiento del peso mexicano, que registró fluctuaciones tras las declaraciones.
Durante la jornada más reciente, la moneda cerró en 20.5722 unidades por dólar, con un avance moderado del 0.45%, luego de haber mostrado un incremento inicial del 0.70%.
La medida, que podría tener consecuencias significativas en las relaciones comerciales de América del Norte, se suma a otras acciones impulsadas por Trump, como el aumento de agentes de inmigración y la suspensión de subsidios federales. Analistas prevén que estas decisiones seguirán impactando tanto a los mercados como a los socios comerciales de Estados Unidos en los próximos días.