martes, diciembre 24, 2024
InicioOpiniónA mi manerA

A mi manerA

Por Julio A. AGUIRRE

 

* Batalla campal.
* La silla presidencial.
* No son todos
 los que están…

Acuérdate en adelante, cada vez que algo te contriste, de recurrir a esta máxima: que la adversidad no es una desgracia, antes bien, el sufrirla con grandeza de ánimo es una dicha. Marco Aurelio Antonio.

    Aquel que llegó a pensar que los consejeros del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), entrarían en un periodo de relajamiento tras los resultados del domingo 7 de junio, se equivocó de calle.

    Nosotros mismos quedamos sorprendidos al conocer el número de juicios de impugnación presentados hasta el día de ayer en el máximo órgano electoral mexiquense.

    Ciertamente, el IEEM sólo es notificado de las inconformidades oficiales pero serán los tribunales electorales estatal y federal los que determinen la viabilidad de cada queja.

    Dicho más claro el Instituto Electoral recibe el balón y de bote-pronto lo manda a otra cancha.

    Nuestro cerebro no registra un proceso electoral que arrojara tantas inconformidades como el pasado reciente. La suma, hasta el día de ayer, repetimos, era de 182 juicios respecto a resultados de presidentes municipales y diputados locales. Más los que se acumulen el día de hoy. Algo parecido a un «Me Late Comicial».

    Lo que pareciera una batalla campal entre partidos, en realidad queda en triangular donde las grandes estrellas son el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

    ¿Qué pelean o qué le tiran los eternos inconformes? No es poca cosa, obviamente.

    El partido tricolor no acepta que el partido del sol azteca -PRD- tenga el municipio de Nezahualcóyotl en la bolsa; tampoco acepta que Acción Nacional se llevara el premio gordo con los municipios de Huixquilucan y Naucalpan.

    El Partido de la Revolución Democrática le revira y se dice inconforme con la victoria del PRI en Temascalcingo, Malinalco y Temascaltepec.

    Entra en escenario la cuchara azul y Acción Nacional muestra apoyo decidido a Juan Rodolfo Sánchez Gómez para que le quiten al partido tricolor la ciudad capital del Estado, Toluca; y aprovechando el viaje, lucharán por Tlalnepantla e Izcalli, entre otros casos.

    Los ayuntamientos en disputa resultan tan preciados, lo sabemos todos, de ahí lo peleado por los actores que bajo mil pretextos argumentan anomalías del ganador.

    Lástima que el pastel mexiquense -125 municipios- no sea tan extenso como pareciese para calmar el apetito político de todos.

    Sabemos que pocas veces las impugnaciones arrojan resultados deseados -por el presentador- sin embargo, se han dado casos; no descartemos, entonces, alguna sorpresa mayúscula donde el vivo se vaya al hoyo y el muerto salga del pozo.

NO POR MUCHO MADRUGAR…

    Jamás descubrimos el sentido de nuestros actos, y sin embargo, en una forma u otra, siempre somos responsables de ellos. Juan García Ponce.

    Entre los primeros en levantar el dedo para buscar la Presidencia de la República en 2018, recordamos al priísta Manlio Fabio Beltrones, recientemente fue Margarita Zavala, esposa del expresidente Felipe Calderón y apenas hace pocas horas Miguel Ángel Mancera, el jefe del gobierno del Distrito Federal que hasta hoy, se puede decir, se declara independiente, candidato independiente.

    Los auto-destapes se dieron antes del proceso electoral del 7 de junio, otros después del fracaso de su (s) partidos, caso Acción Nacional, y Miguel Mancera que nos recuerda a Andrés Manuel López Obrador y al propio Marcelo Ebrard.

    Hombres con fama y popularidad dentro del mismo cargo que de la cima se fueron a la sima.

    Los citados se suman a la lista que encabeza el político tabasqueño, Andrés Manuel, obsesionado con ser presidente con un partido, con otro, o con el propio (Morena).

    Por supuesto que no están todos los que son, ni son todos los que están y bajo este puente, correrá mucha agua.

    El mismo Beltrones, Mancera, Margarita y Obrador desde el momento mismo en que externaron su ambición de ir por el sueño dorado de todo político, ya están en plena campaña  rumbo a la máxima conquista del servidor público.

    En el caso vale aplicar la máxima que dice: Al que madruga Dios lo ayuda, sin olvidar la frase que apunta: No por mucho madrugar, amanece más temprano.

    Por cierto, hay un mexiquense que viene trabajando, sin salirse de su costumbre, que sin duda pronto estará en la lista de los aspirantes al poder máximo. Se llama, Eruviel Ávila Villegas, recuérdenlo.

    Por cierto, ayer el Ejecutivo estatal anunció: «Van más de 500 mil computadoras que hemos entregado, entre tabletas, entre laptops, computadoras tiflotécnicas y quiero informarles que gracias al apoyo del presidente Peña Nieto ya tenemos listas las 330 mil tabletas que vamos a entregarles a los alumnos que van a pasar a quinto grado de primaria el próximo ciclo escolar».

    Tal vez lloré o tal vez reí/ tal vez gané o tal vez reí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también amé, puedo seguir hasta el final…A mi manerA.

Correo electrónico:
aguirre@8columnas.com.mx

PODRÍA INTERESARLE ...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

MÁS LEÍDO