POR Guillermo GUADARRAMA
El día de muertos es una de las tradiciones más antiguas, reconocidas e importantes de México y en Toluca, ésta festividad se anuncia previamente con la llegada de la Feria del Alfeñique, que da color y sabor a las ofrendas que se colocan los días 1 y 2 de noviembre.
Es por eso que, según lo comentado por los comerciantes de esta feria, sus ventas las dividen en tres partes, según conforme se acerca el mes de noviembre.
“Ya sabemos cómo se maneja esta feria, y hasta el tipo de gente que viene según los días que faltan para la llegada del día de muertos”, así lo dijo doña Yadira Colín, quien como cada año tiene su puesto de estos dulces típicos.
Mencionó que, al inicio de esta feria, son los estudiantes y “parejitas” quienes son los primeros en acercarse, sin embargo, asegura que compran poco y en algunos casos únicamente ven sin comprar nada.
“Es como su tiempo libre que tienen con la novia o los amigos y vienen a ver que hay, pero casi no compran y si compran pues son paletitas o dulces de los más baratos, nada más para quitarse el antojo en sus momentos de ocio”.
Posteriormente comienzan con el recorrido de las mamás con sus hijos comprando el intercambio de la escuela, en este momento, las ventas comienzan a verse, pues en la mayoría de las instituciones de educación primaria y secundaria, hacen el famoso intercambio de calaveritas, lo que genera ganancias a los comerciantes.
Y finalmente son los dulces para las ofrendas: “Ya en los últimos días, son las familias quienes vienen a comprar dulces y chocolates de diferentes tamaños, también las figuritas de cartón que tenemos colgadas se las llevan para adornar sus ofrendas, ahí es donde nosotros hacemos nuestro agosto”.
Aunque la última etapa de esta feria es la que les deja más ganancias a estos comerciantes temporales de dulces y chocolates, doña Yadira comenta que se disfruta toda la temporada que dura esta tradición toluqueña.