POR Isabel Blancas
Una báscula mal calibrada puede llevar a la banca rota a un micro establecimiento pues la multa que impone la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por esta falta es de por lo menos 500 salarios mínimos que equivale a más de 35 mil pesos.
La dependencia tiene vigente su programa de calibraciones del 1 de enero al 31 de marzo que es cuando se invita y se informa a los comerciantes y prestadores de servicios que deben calibrar sus aparatos de medición.
Hay dos instancias con quien pueden hacerlo: unidades de verificación que son empresas particulares (uvas) y la Profeco; sin embargo, con esta última el costo es por lo menos 30 por ciento menor.