La ministra del Interior, Amber Rudd, afirmó que el incidente de la medianoche, en el que un vehículo atropelló a fieles cerca de una mezquita en el norte de Londres, fue un «ataque terrorista.
Esta es la cuarta tragedia para Londres en un mes; el un nuevo ataque terrorista se registra justo en el día que se inician las negociaciones del Brexit y una semana después que docenas de musulmanes murieran en la torre quemada en Kensington.
Un sujeto atropelló con una furgoneta a un grupo de feligreses que acudieron a orar a la mezquita de Finsbury Park, luego de terminar el ayuno del mes sagrado islámico de Ramadán. En el ataque murió una persona y otras 10 resultaron heridas.
Las autoridades confirmaron el arresto de un hombre de 48 años de edad, identificado como el conductor del vehículo, quien fue detenido por los transeúntes cuando intentaba escapar del lugar.
La Policía Metropolitana Scotland Yard señaló que «en la investigación realizada sobre este ataque no hay otros sospechosos, sin embargo, la indagación continúa».
El individuo gritaba «quiero matar a todos los musulmanes», reportó la cadena británica BBC.
Un fuerte dispositivo de seguridad fue desplegado después de la medianoche hacia la mezquita de Finsbury Park, en el norte de esta ciudad con ambulancias, patrullas con oficiales antiterrorismo y un helicóptero enviados a la zona.
La policía recibió un llamado de alerta alrededor de las 00:20 hora local de este lunes (23:20 GMT del domingo), y la zona permanece acordonada.
