POR Gerardo GARCÍA HERNÁNDEZ
Además de ser inseguros en ciertas horas del día, parte de los puentes peatonales de Paseo Tollocan se han convertido en verdaderos basureros y su infraestructura ya presenta daños considerables tanto por las condiciones climatológicas ó actos vandálicos.
Por ser una vía primera y parte del corredor industrial del Valles Toluca, a diario y desde temprano, en Tollocan transitan cientos de trabajadores, obreros y estudiantes.
En un recorrido hecho por el equipo de 8 Columnas, desde los primeros pasos en los escalones de los puentes salta a la vista que sus barandales se encuentran en proceso de despistando ó en casos extremos de oxidación.
Al lograr pasar ya en su corredor el escenario no es distinto, donde la infraestructura ya presenta rupturas en las rejas siendo verdaderos “hoyos negros” y es inexistente las luminarias que no fueron sustituidas desde hace años atrás al ser dañadas por la ciudadanía.
Al olvido del mantenimiento de esta infraestructura urbana de primera necesidad, se suma que los residuos sólidos abundan, combinados con olores fétidos o verdaderos estanques de agua de lluvias.
Por si fuera poco, la presencia policial es nula, con excepción al puente a la altura del órgano electoral y la plaza comercial, donde comúnmente existe una o dos patrullas, aunque los elementos siempre están al interior de las unidades.
Lo anterior, hace que estos puentes se vuelvan verdaderos focos rojos de la delincuencia y un peligro para la sociedad mexiquense qué transita en ellos.
