REDACCIÓN
El respeto a la diversidad y orientación sexual es una cuestión de derechos humanos, y todos tenemos derecho a una educación de calidad y a una vida libre de violencia, afirmó el profesor titular de Antropología Social, de la Universidad Complutense de Madrid, España, José Ignacio Pichardo Galán.
Es necesario trabajar en esos temas, porque cualquiera que sea la orientación sexual o la identidad de género “se tiene derecho a vivir una vida sin violencia y, sobre todo, a ser feliz”, dijo al participar en el seminario de Pedagogía Crítica, que organiza el Departamento de Educación de la Universidad Iberoamérica (UIA).
“Nuestros centros educativos tienen que defender los derechos humanos, y no debemos permitir, que por ningún motivo, incluida la orientación sexual o diversidad de género, se generen situaciones de discriminación. Eso nadie lo puede negar. Tenemos la ley de nuestra parte, la ley de derechos humanos hasta la Constitución y las leyes específicas”.
Es responsabilidad de todos, y de cada uno, hacer que ello se haga realidad en la cotidianidad, en los espacios de trabajo, en los centros escolares, en las calles, en los grupos de amistades, y en nuestras familias, aseguró.
Al exponer la conferencia “Abrazar la diversidad: Una responsabilidad educativa», desarrolló seis temas: Sacude tus prejuicios; Cuida tu lenguaje; La diversidad es positiva; Respeta; Implícate, y Fórmate y Transfórmate, y además exhortó a conocer de primera mano la realidad de la comunidad de lesbianas, gay, bisexuales, trans e intersexuales (LGBT).
Asimismo, a participar en sus eventos y celebraciones, y conocer los recursos disponibles para trabajar el respeto a la diversidad sexual, familiar y de identidad de género, así como las instituciones y asociaciones que los ofrecen, pueden ayudar y comparten información.
Aunque hay avances en la eliminación de la homofobia, y la mayoría de la población es respetuosa con la diversidad sexual, si esa minoría continúa con insultos en el centro escolar, «si se sigue haciendo la vida imposible a otros chicos y chicas, al final se permite que se mantenga la homofobia, porque la mayoría se calla”.
El experto español consideró importante incluir el tema en la formación de los docentes, a fin de revertir la homofobia y la discriminación y evitar esas situaciones de insulto y discriminación en los centros educativos, que al final generan abandono y fracaso escolar.
La homofobia genera el «bullying», que además de acoso y violencia hacia quien lo padece a causa de su preferencia sexual, es un factor de riesgo para el suicidio de niños y jóvenes, añadió.
Ante ello, destacó la importancia de visibilizar está situación para combatirla, pero desde el ámbito cultural y de formación.
A quienes más se ataca es a las lesbianas. En España, precisó, se realizó un estudio, que se basó en tres mil 800 entrevistas en aulas de nivel secundaria, que dio como resultado que 13.24 por ciento de los encuestados se querían ligar a las lesbianas.
“Las mujeres están más expuestas a la discriminación, las mujeres lesbianas, que los hombres homosexuales, por eso hay mucho menos visibilidad de mujeres lesbianas que hombres homosexuales”.
Eel 26 de abril se celebró el Día Mundial de la visibilidad Lésbica, por esa «necesidad de visibilizar que también hay mujeres que no son heterosexuales”.