Redacción
Keylor Navas, ex portero del PSG, ha sido envuelto en una controversia tras ser denunciado por un antiguo trabajador. La denuncia alega condiciones de explotación laboral, señalando que Navas habría sometido al empleado a condiciones de trabajo precarias desde septiembre de 2019.
El trabajador, cuya identidad se mantiene en secreto, ha afirmado haber laborado sin contrato ni seguro social durante varios meses. Según su testimonio, trabajaba hasta 90 horas a la semana y recibía un salario de 3,200 euros pagados en efectivo, lo que viola las leyes laborales francesas.
Además de las largas horas de trabajo, el denunciante ha revelado que vivía en un sótano húmedo y sin ventanas en la casa de Navas. Estas condiciones han sido descritas como «esclavitud moderna», generando una fuerte reacción en la opinión pública y en los medios de comunicación.
La denuncia, presentada ante la Fiscalía de Versalles, acusa a Navas de operar fuera de la ley, imponiendo sus propias reglas en lugar de cumplir con las normativas laborales. El trabajador también ha mencionado que el portero lo obligaba a portar un arma, utilizada por Navas para «diversión».
El abogado del denunciante ha subrayado la gravedad de los hechos, afirmando que incluso las estrellas del fútbol deben respetar las leyes y no pueden liberarse de sus responsabilidades legales. Este caso ha puesto en el centro de atención las prácticas laborales de las celebridades y la necesidad de una mayor supervisión.
Hasta el momento, Keylor Navas no ha emitido una declaración pública sobre las acusaciones. La situación ha causado una gran conmoción, especialmente entre los aficionados del fútbol que admiraban al portero costarricense por sus logros en el deporte.
La comunidad espera una respuesta de Navas y del PSG sobre estas acusaciones, que han dejado una mancha en la reputación del aclamado futbolista. La resolución de este caso será crucial para determinar las consecuencias legales y personales para Keylor Navas.
