Redacción
El Estadio Nemesio Diez fue testigo de una noche inolvidable para la Selección Mexicana. México derrotó contundentemente a Honduras por 4-0 en el partido de vuelta de los Cuartos de Final de la Liga de Naciones de la CONCACAF. Este triunfo aseguró su clasificación a la siguiente ronda y un boleto para la Copa Oro, consolidando su dominio en la región.
El encuentro comenzó con gran intensidad, y México se fue al descanso con un ajustado 1-0, gracias a un oportuno gol de Raúl Jiménez. El delantero demostró su experiencia y frialdad en el área al abrir el marcador y dar un respiro a los dirigidos por Javier Aguirre. Este primer tanto encendió los ánimos de los aficionados y marcó el ritmo para una segunda mitad electrizante.
En el complemento, Henry Martín se robó el espectáculo con un doblete que desarmó por completo a la defensa hondureña. Su precisión frente al arco y capacidad para generar peligro en cada jugada marcaron la diferencia. Para cerrar la noche, Jorge Sánchez se sumó al festival de goles, anotando el cuarto y definitivo tanto que selló la victoria mexicana de manera categórica.
Este resultado cobró aún más relevancia tras la inesperada derrota en el partido de ida, donde Honduras se impuso 2-0. La remontada reflejó no solo el talento del equipo, sino también su resiliencia y capacidad para sobreponerse a la adversidad. México respondió con fuerza y determinación, dejando claro que estaba listo para pelear por el título de la competición.
El papel de la afición fue fundamental, llenando las gradas del Nemesio Diez con cánticos y apoyo incondicional. La conexión entre jugadores y seguidores resultó clave para impulsar al equipo en este importante desafío. Este triunfo renovó la confianza de los aficionados en el proceso del técnico y en el potencial del plantel.
Con este paso firme, México no solo avanzó en la Liga de Naciones, sino que reafirmó su lugar como uno de los equipos más competitivos de la CONCACAF. La victoria frente a Honduras fue una declaración de intenciones, y el equipo ya puso la mira en su próximo desafío con la motivación a tope y el sueño intacto de levantar el trofeo.