REDACCIÓN
La temporada 2019-2020 de «En vivo desde el Met de Nueva York», ofrecerá 10 óperas, que incluye las premieres de “Akhnaten”, de Philip Glass, y “Agrippina”, de Georg Fridderic Handel, a cargo de Sir David McVicar, que se transmitirán en la pantalla de alta definición del Auditorio Nacional.
Patricia Ríos, coordinadora de Proyectos Especiales del Auditorio Nacional, quien desde 2009 es la encargada de ese proyecto, adelantó que el nuevo programa, del 12 de octubre de 2019 al 9 de mayo de 2020, está conformado por obras maestras del repertorio operístico.
Tres nuevas producciones se estrenarán: “Wozzeck”, de Alban Berg; “Porgy and Bess”, de George Gershwin, y “El holandés errante”, de Richard Wagner.
Las otras óperas que conforman la programación son: “Turandot”, “Madama Butterfly” y “Tosca”, de Giacomo Puccini, “Manon”, de Jules Manssenet” y “Maria Stuarda”, de Gaetano Donizetti.
“De 10 títulos, tenemos cinco reestrenos, tres nuevas producciones y contaremos con dos premieres, las óperas van desde esa historia de amor del holandés navegando y la gran historia de Wozzeck que ha causado mucha emoción”, explicó Ríos.
Destacó que otra de las obras importantes de la programación es “Akhnaten”, de Philip Glass, que es su tercera ópera que se va a tener en el Met de Nueva York, antes se contó con “Einstein on the Beach” y “Satyagraha”.
Asimismo, este sábado se transmitió desde El Met de Nueva York la ópera “Diálogos de Carmelitas”, de Poulenc, con la participación de las mezzosopranos Isabel Leonard y Karen Cargill y las sopranos Adrianne Pieczonka y Erín Morley, así como el tenor David Portillo y el barítono Jean-Francois Lapointe, entre otros.
La historia se centra en el París de 1789, tiempo en que se ven los primeros indicios de la Revolución Francesa. El marqués de la Force y su hijo, están preocupados por Blanche, la hermana del chevalier, atemorizada y nerviosa, cuyo carruaje ha sido detenido por la multitud durante su trayecto a casa.
Mediante una gran escenografía de época y música en vivo, Blanche no da importancia al incidente, pero su ansiedad la traiciona cuando al salir del cuarto ve la sombra de un sirviente y se asusta. Temblando, regresa con su padre y le anuncia que ha decidido ser monja.