* La actriz habla sobre su libro «Esta soy yo» en el que plasma numerosas anécdotas.
México.- Aunque tuvo la oportunidad de trabajar en Hollywood, la actriz Silvia Pinal aseguró que su decisión de quedarse en México fue porque comenzaba a trazar una importante trayectoria en este país.
Durante la presentación de su libro «Esta soy yo» en la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, la actriz, considerada una de las figuras más importantes del espectáculo mexicano, detalló que se encontraba haciendo «Mame», el primer musical en México y el cual se presentaba en el Teatro del Bosque, con gran éxito, cuando tuvo la opción de elegir qué era lo que quería.
Agregó que fue su representante quien le dijo que podría posicionarla en Hollywood, pero ella decidió no hacerlo porque estaba muy contenta con lo que estaba viviendo. «Así que sólo se lo agradecí muchísimo».
Entre anécdotas, risas y nostalgia, habló del revuelo que ha causado su libro, como sus amores y sus tragedias. Pinal sostuvo que este texto está hecho con mucho cariño y honestidad.
Hay autocrítica, se habla de política, de cine, de teatro, de su faceta como mujer, etc…, dijo Fernanda Tapia, quien fungió como presentadora del libro.
Pese a que reconoció que no todo ha sido fácil en su vida, la actriz mencionó que en este volumen decidió compartir sus alegrías, lágrimas y éxitos tanto en el cine, como en el teatro musical y la política, porque buscaba que fuera algo biográfico, aunque comentó que nunca imaginó que su vida valiera tanto la pena como para hacer un libro.
Al ser cuestionada sobre qué borraría de sus experiencias, expuso que serían los momentos trágicos, «porque esos no los quisiera repetir, ya los pagué muy duro, como la muerte de mi hija, pero ahí aprendí que tienes que salir adelante porque la vida sigue y Dios quiere dejarte en este camino y debes continuar».
Sobre el mejor momento de su vida personal, indicó, fue cuando nació su primera hija Sylvia Pasquel. «Yo estaba muy chica y no sabía qué hacer, entonces le preguntaba a mi mamá qué tenía que hacer y ella me decía pues abrázala mensa, pero aprendí rápido», anotó.
Por otro lado, refirió que en lo profesional, de los momentos más felices que ha tenido fue cuando recibió la Palma de Oro, por su actuación en la película «Viridiana», de Luis Buñuel, y cuando entró al Senado y la vio su mamá. Esos son momentos muy bellos, ella siempre se sintió muy orgullosa de mí», manifestó visiblemente emocionada y con voz entrecortada. Pese a que uno de sus más sonados amoríos fue con Enrique Guzmán, con quien engendró dos hijos, Alejandra y Luis Enrique, otro romance interesante fue el que se dio con Conrad Nicholson Hilton, abuelo de París Hilton. «Los dos nos entendíamos muy bien, aunque él hablaba poco español y yo poco inglés. Duramos como ocho meses», expresó Pinal, quien al final de la breve charla, se dispuso a firmar los libros a sus fans.