Por Alelhi Rodríguez
El cambio a color verde en el semáforo epidemiológico en el Estado de México ha significado el regreso presencial a las áreas laborales, lo que de acuerdo con especialistas de la conducta, ha representado para el ser humano una sensación de evasión.
Alejandro Gutiérrez Cedeño, coordinador del Centro de Estudios y Servicios Psicológicos Integrales (CESPI), precisó que es normal que algunas personas presenten emociones de desconcierto para evadir responsabilidades o alguna situación que implique el contacto con gente, esto ante la incorporación a sus actividades en áreas de oficina o donde desempeñen su labor.
“Debemos entender que nuestros espacios no los vamos a encontrar como hace un año, donde no nos importaba absolutamente nada bueno, ni lavarnos las manos, y que hoy esos nuevos comportamientos, esta nueva normalidad, justamente, es lo que vamos a tener que enfrentar”, manifestó.
Al ser cuestionado sobre si el ser humano pudiera mostrar cierto desánimo ante el regreso a las actividades, comentó que la depresión se vivió en gran porcentaje durante el año pasado, ante la falta de interacción con más personas, así como las pérdidas humanas que se registraron por la enfermedad de Covid-19, pero este 2021 ya hay mayores avances.
“Esas etapas depresivas fueron un momento muy complicado, muy difícil, que la humanidad en general ya sobrepasamos. Y hoy, entre las malas noticias, ya hay buenas, como la reactivación económica, disminución de contagios, hospitalizaciones, vacunas”, puntualizó.
Asimismo, consideró que es normal que la sociedad manifieste algunas emociones como ira y enojo, ante este nuevo proceso también de adaptabilidad.
“Esto se da por la capacidad de adaptarnos a lo nuevo, es decir, no le tengamos miedo a la emoción, porque la emoción nos permite eso, adaptarnos, y esa adaptación nos va a costar trabajo, hasta llegar a la emoción de bienestar”, agregó.
