Redacción
El agua es un derecho humano esencial que garantiza una vida digna y saludable. Todos tenemos la responsabilidad de cuidarla, y las autoridades deben promover la colaboración interinstitucional para hacer frente a los daños causados por la contaminación y el cambio climático. Estefany Morales Sánchez, capacitadora certificada de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), enfatizó la importancia de esta labor.
La dirección de Capacitación, Promoción y Vinculación en Derechos Humanos de la CODHEM trabaja en estrecha colaboración con organizaciones civiles y no gubernamentales para brindar charlas y concientizar a los servidores públicos y a la población en general sobre este derecho humano. El objetivo es promover una mayor conciencia y sensibilidad acerca de cómo cada persona puede contribuir para evitar la contaminación y el desperdicio del agua.
Dentro de la Casa de la Dignidad y las Libertades, se han implementado diversas iniciativas para proteger el medio ambiente. Estas incluyen una campaña interna de reforestación en el parque Alameda 2000, políticas de reciclaje de papel y ahorro de energía eléctrica, así como la gestión adecuada de materiales contaminantes como baterías y dispositivos electrónicos. Además, se llevan a cabo actividades en colaboración con asociaciones civiles con el fin de alcanzar metas ambientales y establecer políticas públicas.
Es fundamental tomar conciencia del cambio climático y su impacto en la escasez de agua en algunas áreas. Como ciudadanos y familias, debemos participar en proyectos y programas que contribuyan a mejorar el medio ambiente. Esto implica reducir las emisiones de gases mediante el uso responsable del automóvil, limitar el tiempo de baño, recolectar y reciclar el agua que cae de la regadera, evitar desecharla en fregaderos y lavabos, y no verter aguas residuales en ríos y cuerpos de agua. Además, la reforestación y la creación de espacios verdes son acciones clave.
La capacitadora hace hincapié en la gravedad que tendría la escasez de agua en todas las áreas de nuestra vida. Este líquido vital es indispensable para la alimentación, la salud, el desarrollo integral y la supervivencia humana. Por tanto, es crucial el compromiso y la colaboración de la CODHEM en la defensa de este derecho humano.
