Por Guadalupe de la Cruz
Enrique Gómez Bravo Topete, rector de la Universidad de la Salud del Estado de México, dijo que después de la pandemia de Covid-19 se avecina una cascada de enfermedades crónico-degenerativas que padece un importante sector de la población mexiquense y que se han dejado de atender, debido a que no hay espacio ni medicamentos para brindar consultas.
“Desafortunadamente, todas las enfermedades crónico degenerativas se han descuidado, porque no se han atendido adecuadamente, pero todo porque no se ha otorgado el medicamento de manera constante; creo que no se han medido las consecuencias reales que traerá dicho descuido”, precisó.
En entrevista, el rector de UNSA indicó que con la desaparición del Seguro Popular se vino a bajo la atención para personas de escasos recursos “y, por ende, la Secretaría de Salud no adquirió los medicamentos necesarios, dando inicio a un Instituto de Salud para el Bienestar que nada más no ha operado y la gente está desampara, a la deriva, sin ser atendida y sin que se le entregue el medicamento necesario para atender su padecimiento”.
Gómez Bravo Topete advirtió que todas las consecuencias que traerá dicho descuido serán severas y muy costosas, “desgraciadamente no se está atendiendo a este sector de la población, hay muchos reclamos de falta de medicamento por parte de quienes padecen alguna enfermedad crónica degenerativa, cáncer, infecciones renales, trastornos mentales, entre otros”.
Dicha situación, mencionó, podría tener desenlaces fatales con cascada de muertes también por dichos padecimientos, ya que las autoridades no han dimensionado el problema de la falta de atención a este tipo de enfermedades.
