Redacción
La incidencia del delito de extorsión en el Estado de México disminuyó 30 por ciento durante el último año, al registrarse 754 casos menos que en el periodo anterior, informó el secretario de Seguridad estatal, Cristóbal Castañeda Camarillo, durante su comparecencia ante el Congreso local. Detalló que este delito, uno de los más dañinos para la economía familiar y empresarial, mantiene una tendencia sostenida a la baja derivada de las acciones implementadas por el gobierno de la maestra Delfina Gómez Álvarez.
El funcionario señaló que los resultados obedecen a una estrategia integral basada en patrullajes focalizados, labores de inteligencia y operativos conjuntos con la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional. Agregó que la participación ciudadana ha sido fundamental, pues la confianza en las instituciones ha incrementado el número de denuncias que permiten actuar con mayor rapidez.
Dentro de esta política de seguridad, la Policía estatal atendió en tiempo real a más de 32 mil personas que estuvieron en riesgo de ser extorsionadas, con lo que se evitaron pérdidas calculadas en más de 331 millones de pesos. Además, el número de llamadas falsas al número de emergencia 089 alcanzó 66 mil 241, todas atendidas como parte de la estrategia nacional de denuncia.
Castañeda Camarillo explicó que las operaciones denominadas Enjambre, Liberación y Bastión han sido decisivas en la contención de este delito, al desarticular redes de extorsión y fraudes dirigidos a comerciantes, transportistas y empresarios. Indicó que, como resultado de dichas acciones, se detuvo a 60 funcionarios implicados en prácticas de extorsión.
El secretario subrayó que la coordinación interinstitucional ha permitido avanzar en la reconstrucción del tejido social y en la pacificación del territorio mexiquense. Destacó que estos resultados son fruto del trabajo conjunto entre los tres órdenes de gobierno, encabezados por la gobernadora Delfina Gómez Álvarez y con el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Aseguró que la estrategia de seguridad continuará fortaleciendo las capacidades operativas y tecnológicas para mantener la tendencia a la baja en delitos de alto impacto.
El funcionario reconoció el papel de la ciudadanía, cuyo apoyo mediante la denuncia oportuna contribuye a identificar patrones delictivos y a consolidar una cultura de prevención.
Finalmente, reiteró que el compromiso de la administración estatal es garantizar condiciones de seguridad y confianza que permitan el desarrollo económico y social del Estado de México.
