Alelhi Rodríguez
Fabián Morales Estrada y Adolfo Morales Ordaz, jamás se imaginaron que al construir una cisterna en el patio de su casa, encontrarían restos de un mamífero que habitó en la tierra hace miles de millones de años.
Los habitantes de San Lorenzo Toxico en el municipio mexiquense de Ixtlahuaca hallaron dos huesos de gran tamaño, y al percatarse de que los restos correspondían a una especie poco común dieron aviso al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para los respectivos estudios.
«Empezamos con la pala y pico a aflojar la tierra, pretendíamos hacer una cisterna mi hijo y yo de más de 2 metros de profundidad. Cuando llegué a ese nivel me percaté de una pieza de color blanco, pensando que era tepetate, y ya a la hora que vi me di cuenta que era un hueso”, platicó Fabián.
Tras la visita del INAH, los dueños del inmueble, informaron que los restos óseos corresponden a un fémur y una mandíbula posiblemente de un mamut o un mastodonte.
Mismos, que han generado sorpresa dicen a los habitantes, y hasta propiciado turismo en la zona.
“Hemos tenido bastante visita de la comunidad y por fuera mucha gente que ha venido a ver y a desengañarse porque muchos decían que era un animal cualquiera, que se había muerto aquí, ya cuando vienen si se sorprenden del tamaño de este y sí ha venido mucha gente”.
En próximos días, el INAH, determinará si continuarán con la excavación en este sitio para el posible hallazgo de más huesos.