Lilia González
Con su aprobación -por mayoría- en el Pleno, el Estado de México se convirtió en la entidad número 29 en aprobar el Matrimonio Igualitario, asumiendo y reconociendo así la diversidad en favor de más de 489 mil mexiquenses que se identifican como integrantes de la comunidad LGBTTTIQ+.
Se especificó que el objetivo principal de lo aprobado fue el modificar el Código Civil del Estado de México para permitir el acceso al matrimonio de forma igualitaria sin importar las preferencias sexuales.
Tras cerca de 13 años de espera para la aprobación de esta iniciativa en la entidad, se logró materializar con 50 votos a favor, 16 en contra y 7 abstenciones el concebir el matrimonio como una institución de carácter público e interés social por medio de la cual dos personas de manera libre y voluntaria deciden compartir un estado de vida para la búsqueda de su realización personal y conyugal bajo formalidades y solemnidades que establezca el Código Civil.
Hasta hoy, solo quedan tres entidades en el país que no reconocen el Matrimonio Igualitario: Guerrero, Tamaulipas y Tabasco, logrando avanzar el Estado de México, lo dicho por las y los legisladores mexiquenses, con ello se dejan atrás los prejuicios y se da paso al respeto de los derechos humanos.
La diputada de Movimiento Ciudadano, Juana Bonilla Jaime indicó que una vez aprobada la unión legal de personas del mismo sexo, aún resta el poner freno a los crímenes de odio. La diputada de Morena, Beatriz Villegas se pronunció en la misma vertiente, pues dijo, hoy en día la entidad ocupa la tercera posición en el registro de más crímenes de odio por tener preferencias sexuales diferentes, de ahí en que se deba sancionar el feminicidio y transfeminicidio.
“Con la aprobación de este Dictamen no hay agresión ninguna al matrimonio ni a la familia en la posibilidad de que dos personas del mismo sexo se casen. Al contrario, lo que hay es un cauce para realizar la pretensión que tienen esas personas de ordenar sus vidas con arreglo a las normas y exigencias del matrimonio y de la familia. No hay una conculcación de la institución matrimonial, sino justamente lo opuesto: valoración y reconocimiento del matrimonio.”, expresó la diputada Anaís Miriam Burgos.
Por su parte, Leonardo Espinosa López, defensor de la comunidad LGBTTTIQ+ sostuvo que aún queda en laguna jurídica la adopción monoparental, la cual advirtió que la estarán impulsando en la próxima Legislatura.