* Destacan por su impulso y desarrollo de formas pacíficas de resolución de controversias.
La magistrada María Cristina Miranda Cruz, directora general del Centro Estatal de Mediación, Conciliación y Justicia Restaurativa dijo que la experiencia que cotidianamente se vive en los centros de Mediación permite apreciar que las mujeres, destacan en el impulso y desarrollo de las formas pacíficas de resolución de controversias previstas por el marco legal estatal, nacional e internacional.
Asimismo, comentó que la razón de este impulso radica en el deseo de las mujeres por lograr una amigable composición con sus congéneres para que la paz prevalezca; para que la paz alcance a sus hijos, a su pareja, familia, vecinos, socios, empleados, jefes, a la sociedad en general.
«Si bien, la mediación, conciliación y justicia restaurativa, presentan un contexto ideal para la consecución de los fines personales o sociales, la participación de la mujer introyecta en el desenvolvimiento de esto, aquellos valores que tanto hacen falta a México en este momento histórico; en donde la concordia, solidaridad, amistad y unidad, adquieren entonces, su verdadera dimensión y sentido en cada caso particular».
Miranda Cruz, señaló que cada acuerdo derivado de un proceso de justicia alternativa, en el cual, la mujer haya asumido un compromiso de reconocer la capacidad dialógica para resolver el conflicto en paz, de suyo conlleva altas probabilidades de cumplimentarse voluntariamente, libre y ordenadamente, en paz, sin aspavientos; porque la mujer intuye que la paz es un concepto dinámico, no estático, que la paz es un estado, resultante del trabajo coordinado, inteligente, justo y respetuoso entre semejantes.
«Las bondades de la justicia alternativa se potencian con la activa participación de las mujeres, el derecho mismo adquiere eficiencia y eficacia cuando la flexibilidad femenina, concede paso al reconocimiento del otro, no como rival, sino como colaborador en la solución amigable de los conflictos», concluyó.