REDACCIÓN
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, permanecerá en prisión hasta que se celebre en febrero próximo una audiencia para decidir si es o no extraditado a Estados Unidos, determinó este viernes el Tribunal de Magistrados del distrito de Westminster de Londres.
En una vista en la Corte de Magistrados de Westminster, la jueza Vanessa Baraitser decidió que Assange siga preso debido a su «historial de evasión», pues existen “indicios sustanciales” para temer que pueda volver a evadir la acción de la Justicia.
El australiano, de 48 años, debía ser liberado el próximo 22 de septiembre de la prisión de máxima seguridad de Belmarsh, en el sureste de Londres, tras cumplir la mitad de su actual sentencia por violar las condiciones de su libertad bajo fianza que cometió durante su permanencia en la embajada de Ecuador en Reino Unido.
«Usted compareció hoy en la corte porque su sentencia está llegando a su fin, cuando esto suceda, pasará de ser un prisionero en servicio a una persona que se enfrenta a la extradición», dijo Baraitser, citada por la cadena británica BBC.
La defensa de Assange no presentó la solicitud de liberarlo bajo fianza, pues, según la jueza, el ciberactivista cuenta con “historial de fugas en estos procedimientos”.
Assange, quien compareció por videoconferencia desde la prisión, fue preguntado si comprendía la situación en la que se encuentra: «La verdad es que no, estoy seguro de que los abogados me la explicarán», respondió.
El fundador de WikiLeaks se enfrentará el 25 de febrero próximo a una audiencia de extradición a Estados Unidos, país que lo reclama por la filtración de miles de documentos secretos en su portal, cargos que pueden suponer una condena de hasta 170 años de prisión.
Según la denuncia de Estados Unidos, Assange habría participado en actividades informáticas en complicidad con la exagente de inteligencia del Ejército estadunidense, Chelsea Manning, quien suministró a WikiLeaks miles de documentos clasificados, entre ellos datos sobre las guerras en Afganistán e Irak.
Assange se había refugiado en la embajada ecuatoriana en Londres desde junio de 2012 hasta el pasado 11 de abril, cuando las autoridades de Ecuador decidieron retirar su asilo diplomático debido a las violaciones de convenciones internacionales y protocolo de convivencia.
Una vez expulsado, Assange fue arrestado por la policía británica y ahora permanece ingresado en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, en espera de su posible extradición a Estados Unidos.