Rafael Rodríguez
El fiscal general de Tamaulipas, Irving Barrios Mojica, ha afirmado en una conferencia con autoridades federales y estatales que la investigación sobre los cuatro ciudadanos estadounidenses secuestrados en Matamoros se fortalece en la dirección de que fueron confundidos y no atacados directamente.
Según el fiscal, el intercambio de información ha llevado a la conclusión de que «fue una confusión, no fue una agresión directa». El grupo delictivo responsable aún no ha sido confirmado, pero se cree que es el Cártel del Golfo.
Las autoridades estatales han informado que una persona, identificada como José «N», de 24 años de edad, fue detenida en relación con el secuestro y se encontraba en funciones de vigilancia de las víctimas de origen estadounidense. Después de un operativo de búsqueda, las cuatro personas secuestradas fueron encontradas en una casa de madera en el ejido «El Tecolote» en Matamoros, Tamaulipas.
Una mujer y un hombre herido fueron entregados a las autoridades de Estados Unidos, mientras que los dos hombres fallecidos serán repatriados después de hacer los estudios periciales de ley a los cuerpos.
El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, ha confirmado que tres personas perdieron la vida en el incidente, incluyendo una mujer de origen nacional que murió por una bala perdida a una cuadra y media de distancia de donde se estaban dando los hechos. En cuanto a los ciudadanos estadounidenses, se desconoce cómo perdieron la vida y uno de ellos resultó herido en la pierna izquierda, pero está fuera de peligro.
Los medios estadounidenses habían informado previamente que los cuatro estadounidenses secuestrados ya habían sido identificados y que el ataque habría sido por una confusión. Según el diario ABC News, los ciudadanos estadounidenses son Latavia «Tay» McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams. CNN informó que las víctimas habrían sido confundidas con traficantes de drogas haitianos y que no se han encontrado antecedentes criminales entre los desaparecidos.
La madre de McGee, Barbara Burgess, dijo a ABC News que su hija viajó a México para una operación cosmética y que le había advertido que evitara viajar a Tamaulipas. El FBI ha ofrecido una recompensa de 50 mil dólares por el regreso de las víctimas y el arresto de los responsables