Redacción
La reciente interrupción del suministro eléctrico en Cuba ha generado un amplio malestar entre la población, que enfrenta dificultades adicionales debido a la dependencia de la electricidad para servicios básicos como el abastecimiento de agua. La situación se agrava por la proximidad del huracán Oscar, que avanza hacia la isla tras impactar en Bahamas.
En la capital, algunos barrios lograron recuperar el suministro eléctrico, pero gran parte de La Habana continúa a oscuras. La escasez de electricidad ha obligado a muchos a recurrir a métodos improvisados para cocinar, mientras que otros se enfrentan a la pérdida de alimentos en sus refrigeradores. La angustia de los cubanos se hace evidente, reflejando una creciente desesperación.
La crisis se originó con la falla de la planta Antonio Guiteras, un incidente que desencadenó el colapso del sistema eléctrico en la isla. Este evento se suma a una serie de problemas crónicos en la infraestructura energética de Cuba, donde los cortes de luz se han vuelto comunes. Durante las últimas semanas, algunos hogares han experimentado apagones de hasta ocho horas diarias.
El gobierno cubano ha comenzado a implementar medidas de emergencia para hacer frente a la crisis. Estas incluyen la suspensión de actividades escolares y la reducción de la carga de trabajo en ciertos sectores. Las autoridades atribuyen la situación a un aumento en la demanda de energía, exacerbado por el uso de aire acondicionado y el deterioro de plantas eléctricas antiguas, que carecen del mantenimiento necesario.
La preocupación entre los ciudadanos ha aumentado con la llegada del huracán Oscar, que trae consigo la amenaza de fuertes lluvias y vientos. Las previsiones meteorológicas indican que algunas regiones de Cuba podrían recibir entre cinco y quince pulgadas de lluvia, lo que podría complicar aún más la situación.
A medida que las autoridades continúan evaluando el estado del sistema eléctrico y los efectos del huracán, la población se mantiene en estado de alerta, esperando que la situación mejore.