* Sólo si esta potencia revierte su política hostil
contra el régimen de Pyongyang.
Naciones Unidas.- El representante alterno de Corea del Norte ante Naciones Unidas (ONU), Kim In Ryong, afirmó que el diálogo entre su país y Estados Unidos es posible sólo si esta potencia revierte su política hostil contra el régimen de Pyongyang.
En una conferencia de prensa celebrada en la sede de la ONU en Nueva York, Kim reconoció que Estados Unidos ha manifestado gestos conducentes al diálogo, pero puntualizó que lo importante son los hechos y no las palabras. «La retracción de la política hostil hacia Corea del Norte es el requisito previo para resolver todos los problemas en la península coreana», sostuvo el diplomático.
Kim aseguró que esas políticas hostiles son «la raíz de todos los problemas» en la península de Corea y la razón por la que el régimen de Pyongyang desarrolla armamentos nucleares. Corea del Norte ha expresado de manera reiterada que sus esfuerzos para desarrollar armas nucleares se deben a las amenazas que percibe de parte de Estados Unidos, país que realiza ejercicios militares conjuntos con Corea del Sur en la península coreana.
Asimismo, Kim recordó que Estados Unidos tiene desplegado un amplio arsenal cerca de Corea del Norte, lo que Pyongyang considera como una amenaza a su seguridad nacional.
«Estados Unidos debe tener en cuenta que la capacidad de ataque nuclear de Corea del Norte se fortalecerá y desarrollará rápidamente si Estados Unidos insiste en su política contra Corea del Norte, si mantiene sus amenazas nucleares, su chantaje, sanciones y presión», aseveró el diplomático.
La conferencia de Kim se produjo luego de que el fin de semana pasado Corea del Norte realizara con éxito el lanzamiento de un misil que, de acuerdo con sus declaraciones, es capaz de contener una ojiva nuclear.
Dicha prueba contravino las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que estudia adoptar nuevas sanciones contra el régimen de Pyongyang. Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, aseguró en una conferencia en Washington DC que Estados Unidos trabaja con China, Japón y Corea del Sur para tratar de encontrar una salida diplomática a la tensión en la península coreana.