* Resolvió la inmediata entrega del exgobernador
de Veracruz a autoridades mexicanas.
Guatemala.- La justicia guatemalteca resolvió la «inmediata entrega» del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, a autoridades de México, en un trámite administrativo que llevaría entre 14 y 18 días hábiles.
El juez Quinto de Sentencia Penal, Adán García, emitió su resolución al cierre de la audiencia del proceso contra Duarte, quien fue detenido con fines de extradición a México el 15 de abril pasado en el sitio turístico de Panajachel, municipio del occidental departamento de Sololá.
El titular del juzgado explicó que el caso se resolvió de acuerdo «con la manifestación que ha hecho el reclamado (Duarte), quien ha renunciado a cualquier planteamiento o acción que pueda corresponder para evitar la entrega», solicitada por la justicia mexicana.
En una breve resolución de tres puntos, el tribunal informó que «admite la aceptación voluntaria que ha hecho el reclamado, Javier Duarte de Ochoa, a la solicitud de extradición que hace en su contra» el gobierno de México.
«En consecuencia, se suspende el trámite del procedimiento de extradición y se ordena la entrega inmediata del reclamado» a la justicia mexicana, de acuerdo con el texto.
«Se toma nota que Duarte y su abogado defensor, Carlos Velásquez, han renunciado expresamente al planteamiento de cualquier recurso o acción ante cualquier órgano jurisdiccional o constitucional» de Guatemala, se indicó en el fallo.
El punto tres de la resolución ordena que se comunique la decisión tomada al Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala y se ponga a su disposición al exgobernador veracruzano «para que coordine con las autoridades del Estado requiriente (México) hasta que se verifique la entrega» del detenido.
En declaraciones a periodistas antes de que se diera lectura a la resolución del juez, el abogado Velásquez estimó que el trámite de entrega a las autoridades mexicanas llevaría entre 14 y 18 días hábiles.
Fuentes del Organismo Judicial de Guatemala señalaron que, luego de que la parte acusada se allanó a la extradición y renunció a plantear cualquier recurso legal que obstaculice o retrase ese trámite, la entrega del exgobernador de Veracruz podría cumplirse antes de ese tiempo.
«Paciencia, paciencia», declaró Duarte en forma escueta ante numerosos periodistas mexicanos y locales, que lo abordaron a su salida de la sala de audiencias del Juzgado Quinto de Sentencia Penal, ubicada en el piso 11 de la Torre de Tribunales, en el centro de la capital guatemalteca.Esposado y con paso lento, entre tumultos y numerosos custodios del Sistema Penitenciario de Guatemala, abogados y periodistas mexicanos y locales, Duarte fue sacado del edificio.
En medio de los guardias penitenciarios y bajo decenas de cámaras de los periodistas, Duarte fue conducido a la camioneta pick up que lo llevó de regreso a la cárcel Matamoros, que funciona en una base militar de la céntrica zona uno.
El exgobernador veracruzano, vestido con ropa sencilla (pantalón y camisa, sin saco ni corbata), mostró un semblante serio y hasta preocupado. A diferencia de la audiencia de la semana pasada por el segundo proceso de extradición solicitado por el gobierno de Veracruz.
«Una vez analizadas las acusaciones planteadas en material federal, esta defensa ha decidido allanarse a la solicitud de extradición», se indicó en un comunicado que la defensa del expolítico veracruzano distribuyó antes de que se emitiera la resolución del juez.
«Dichas acusaciones, operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, no resisten un análisis jurídico serio y, por lo tanto, se ha optado por proceder a enfrentarlas» en México, sostuvo la defensa guatemalteca de Duarte.