Redacción
Las inundaciones repentinas en el estado de Sikkim, en el norte de India, han causado la trágica muerte de al menos 14 personas, mientras que más de 100 permanecen desaparecidas, incluyendo unos 22 militares, debido a las fuertes lluvias que han dejado algunas áreas completamente aisladas.
El director de la Autoridad para la Gestión de Desastres del estado, Prabhakar Rai, confirmó que el número de víctimas fatales ha alcanzado las 14, y aún se desconoce el paradero de 120 personas. Entre los desaparecidos se encuentran 22 soldados que quedaron atrapados por la crecida del río Teesta cerca de Singtam.
A pesar de las adversas condiciones climáticas, las operaciones de rescate continúan en marcha, aunque su alcance se ve limitado debido a las intensas lluvias.
Los equipos estatales de rescate no han podido ser desplegados, y las zonas más afectadas, como el distrito de Mangan, permanecen completamente incomunicadas sin acceso por carretera ni telecomunicaciones.
El Gobierno ha respondido al desastre desplegando tres unidades de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF, por sus siglas en inglés) para ayudar en las labores de rescate.
Las fuertes precipitaciones, combinadas con el desbordamiento de un lago glaciar, llevaron al desbordamiento de la presa de Chungthang y a la crecida del río Teesta, que alcanzó entre cuatro y seis metros, causando daños a puentes, carreteras y viviendas en la región.
Estas trágicas inundaciones en India recuerdan la vulnerabilidad de la región a las condiciones climáticas extremas, con lluvias monzónicas anuales que causan significativas pérdidas humanas y materiales, especialmente durante el período de mayo a septiembre.
En febrero de 2021, una avalancha de agua y lodo debido a la rotura de un glaciar dejó al menos 45 muertos y alrededor de 160 desaparecidos en el distrito de Chamoli, en el estado de Uttarakhand, en la cordillera del Himalaya.