Guadalupe de la Cruz
Los sellos de restricción del servicio de agua potable que fueron colocados por el Ayuntamiento de Toluca a centros comerciales, así como a la clínica 250 del IMSS se debe a la falta de pago y lo que busca la autoridad municipal es que se regularicen.
Raymundo Martínez Carbajal, presidente municipal Toluca refirió en entrevista que la intención es que tanto los habitantes, como las empresas y dependencias de gobierno tengan un mayor aprecio por el agua, “y que todos hagamos lo que tenemos que hacer y si queremos que el servicio sea óptimo, todos tenemos que hacer la parte que nos toca, que es cooperar”.
El edil señaló que traer el agua a las ciudades es muy complicado y en el caso de Toluca, se tiene la fortuna de contar con abundancia de líquido, “pero tenemos que recordar que tenemos de vecina a la CDMX, por lo que cooperamos para que la capital del país tenga las condiciones adecuadas en materia de servicio”.
El tema de restricción de empresas o comercios se debe a adeudos anteriores y lo que estamos buscando es que nos sentemos a una mesa de negociación para que puedan pagar, “ya que es un tema de conciencia, de trabajo conjunto y por supuesto de regularización”.
Martínez Carbajal, comentó que solo de deuda de agua potable por parte de dependencias de gobierno el monto asciende a 500 millones de pesos -sin contar el predial-, en lo que se refiere a empresas es mucho mayor, “pero como autoridad estamos entrando a un periodo de comprensión, pues todos los servicios cuestan y todos queremos que sean óptimos pero si no pagamos, esto no puede ser realidad”.
Finalmente el presidente municipal de Toluca dejó muy claro que es difícil que se cancele el contrato de agua potable a una empresa, dependencia o particular, sino que se establece un periodo de negociación para que se pongan al corriente con el pago del servicio”.