Redacción
Las tensiones entre el poder Ejecutivo y Judicial en México tuvieron otro encontronzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador apuntó hacia la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, acusándola de empoderar a los jueces para liberar a delincuentes. Esta acusación tuvo lugar durante una de las conferencias matutinas en Palacio Nacional, donde el líder mexicano no dudó en cuestionar la autonomía de los jueces en su país.
López Obrador subrayó que, si bien los jueces deben gozar de autonomía, dicha autonomía debe ir de la mano con el estricto cumplimiento de la ley. El mandatario añadió que cualquier liberación de un violador o narcotraficante no se puede atribuir al gobierno, sino a un juez que pertenece al Poder Judicial. En sus palabras, la presidenta de la SCJN, con sus declaraciones, ha dado a los jueces «manga ancha» para actuar a su antojo.
El tema de la autonomía de los jueces es un punto de discusión en México. La presidenta de la SCJN, Norma Lucía Piña, ha defendido la independencia de los jueces. Sin embargo, López Obrador se ha mostrado en desacuerdo, afirmando que esta postura permite a los jueces tomar decisiones que, a su parecer, no se alinean con el imperativo legal y moral de justicia.
En respuesta a las palabras de López Obrador, la ministra Piña, a principios de marzo, hizo un llamado a los jueces para que actúen de manera independiente y responsable en sus sentencias. Durante una reunión en el Palacio de Justicia de San Lázaro, recalcó la importancia de la dignidad del Poder Judicial y el papel vital de los jueces en la sociedad.
La ministra Piña instó a los jueces a actuar con responsabilidad, a pesar de las circunstancias difíciles. Enfatizó que todos podrán salir adelante si se comportan con prudencia y responsabilidad, sin que se confunda con cobardía.
Por otro lado, López Obrador no dudó en criticar fuertemente al Poder Judicial, al que calificó de «podrido» y «echado a perder». Según el presidente, este poder fue subyugado por mucho tiempo al poder económico y político, aunque ahora se considera libre del sometimiento político.
A pesar de estar en medio de un proceso de transformación, López Obrador dejó en claro que no se puede erradicar de raíz el régimen de corrupción. De acuerdo con el presidente, el Poder Judicial requiere una reforma integral y necesita ser elegido por el pueblo de México.
La polémica entre el poder Ejecutivo y Judicial continúa en México. Mientras el presidente López Obrador insiste en la necesidad de reformar el Poder Judicial, la ministra Piña defiende la autonomía y la responsabilidad de los jueces. Sin duda, esta disputa marcará el rumbo político y judicial del país en los próximos meses.
