Redacción
Las altas temperaturas y el fuerte estiaje que han afectado al sureste mexicano durante los últimos meses han llevado a un drástico descenso en el nivel de la presa de Malpaso, ubicada en el estado de Chiapas.
Y es que el escuchar de la iglesia de Quechula, no es nada nuevo, puesto que es considerada como uno de los atractivos del estado, debido, entre otras cosas, a su misteriosa condición debajo del agua.
Sin embargo, de manera repentina, este lugar ha sido destapado por completo gracias a la sequía que afecta el río, esto en medio de la tercera onda de calor de 2023.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la iglesia o basílica de Quechula fue construida en el siglo XVI por la orden de Santo Domingo durante su llegada a la entonces Nueva España.
Tiempo después, entre 1773 y 1776, el recinto quedó abandonado a causa de una serie de plagas.
En cuanto a su hundimiento, la misma dependencia explica que, probablemente, lo anterior se debió al desborde del río Grijalva, ocasionando también la orografía de la zona.
Tras varios siglos, en 1966 construyeron la presa de Malpaso, que hizo visible la parte superior del inmueble.
Producto de ello, muchos turistas de distintas partes del país y el mundo se animaban a visitarlo utilizando una lancha.
Sin embargo, a partir de ahora ya no será necesario tomar una embarcación para apreciar la iglesia de Quechula, pues la gente ya comenzó a arribar vía automóvil o motocicleta.
La prolongada sequía en Chiapas ha ocasionado que el nivel de la presa de Malpaso descienda al punto de dejar al descubierto por completo la Iglesia hundida de Quechula.