- La presidenta de Chile hizo un reconocimiento a la Ley Federal de Transparencia y Acceso
a la Información Pública Gubernamental de México, así como la creación del INAI.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, hizo un reconocimiento a la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, así como la creación del INAI que, dijo, representan pasos gigantes en materia de «accountability».
Sostuvo que desde su país ven con enorme interés los avances en México hacia la constitución de un Sistema Nacional de Transparencia y Acceso a la Información en el marco de la lucha contra la corrupción «a partir de una arquitectura novedosa y de alto estándar».
Durante la sesión solemne de la Comisión Permanente que se llevó a cabo en el Salón de Sesiones del Senado de la República, la mandataria sudamericana expuso que lograr más transparencia constituye uno de los grandes desafíos que tiene la democracia.
«Nuestras sociedades la demandan hoy con más fuerza que nunca porque la calidad de nuestras democracias se va a medir también en la capacidad de producirla», subrayó.
De acuerdo con Bachelet, México y Chile son dos países que avanzan decididos en la tarea de producir condiciones institucionales para que la transparencia esté al alcance de los ciudadanos.
«En Chile entendemos que la transparencia es una apuesta por la fe pública y un incentivo a la confianza que debe sustentar nuestra convivencia y nuestras relaciones sociales», agregó.
Además, abundó, es una herramienta para empoderar a la sociedad en todo el mundo, fortalecer la rendición de cuentas para permitir una participación informada en la deliberación común. «Más transparencia en ese sentido es sinónimo de mejor democracia».
Como país estamos atentos al desempeño de la nueva articulación que ha generado México en su organismo de control y fiscalización.
«Me refiero a las auditorías y contralorías, entidades pro acceso a la información o al caso del Instituto Nacional de Transparencia y otras instituciones que permiten abordar esta temática como debe hacerse, integralmente, tal como México lo ha hecho», expuso.
En ese sentido, prosiguió, Chile comparte con México una convicción fundamental: «Una democracia no tiene derecho a negar la visibilidad de sus actos a sus verdaderos soberanos y mandantes».
Bachelet señaló que no se trata de un gesto del Estado hacia las personas. «Se trata de reconocimiento y el cumplimiento de un derecho de cada ciudadano, sabes quiénes les representan, quiénes los lideran, cuáles son los intereses y motivaciones que los guían y qué es lo que hacen en su actividad pública».
Desde la tribuna parlamentaria, acotó que Chile, al igual que buena parte de las democracias del mundo, atraviesa por una crisis de confianza en la política, en las instituciones y en los negocios.
Alertó que esto ha sido detonado por malas prácticas que debilitan nuestra democracia y no siempre se conducen con los altos estándares que nos han hecho merecedores del prestigio internacional en materia de probidad.
«En nuestro país es una exigencia de primer orden enfrentarlo y eso nos ha exigido abordar de frente temáticas como los conflictos de interés y las faltas a la ética, y en algunos casos cuando ha habido actos de corrupción, que son escasos, que son menores, pero que justamente no queremos dejar pasar».
Lo estamos haciendo desde el cauce institucional. «Sabemos la urgencia de actuar enérgicamente para terminar con malas prácticas que pueden dañar la confianza: la confianza en el otro, la confianza en los representantes».
«La confianza en empresarios, las actividades económicas, la confianza en las instituciones, la confianza en las causas colectivas, la confianza en el Estado», dijo.
Sin esa confianza, advirtió, el individuo se encuentra solo e impotente frente a Estados de los que no se siente parte o a los que teme.
Por lo tanto, subrayó, debemos ver este desafío como una tremenda oportunidad para avanzar hacia nuevos estándares a la altura de lo que hoy día tenemos y que la propia transparencia genera, que es ciudadanías y sociedades más exigentes.
Si la transparencia es la propiedad de dejar pasar la luz y las miradas, sentenció, entonces deseamos que esa transparencia inunde nuestras sociedades y naciones con sus brillos y con sus insuficiencias.
«Que esa transparencia que hoy nos convoca crezca y nos permita avanzar hacia democracias más luminosas, más enteras y más conscientes de sí misma», manifestó.
El Congreso mexicano, al igual que el de Chile, está en esta misma línea. «Tenemos los mismos desafíos y estamos seguros que unidos como países y unidos como región, saldremos adelante con democracias más fortalecidas y con sociedades más justas, solidarias y dando a cada uno de nuestros ciudadanos la dignidad que todos se merecen», puntualizó.