Redacción
El gobierno de Sinaloa anunció la suspensión de los festejos patrios programados para el 15 de septiembre en la explanada del Palacio de Gobierno. El gobernador Rubén Rocha Moya informó que, en lugar del evento público, se llevará a cabo un protocolo oficial dentro del Palacio, con la escolta, la banda de guerra y su gabinete, sin la presencia de público ni invitados. La decisión se tomó en respuesta a la ola de violencia que afecta varias zonas del estado en los últimos días.
El evento originalmente contemplaba un concierto con la participación de Pepe, Ángela y Leonardo Aguilar en un espacio dispuesto en la Avenida de los Insurgentes, en Culiacán. Sin embargo, debido al incremento de la violencia, las autoridades optaron por cancelar la celebración pública. De igual manera, la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) decidió suspender su propia conmemoración del 15 de septiembre como medida preventiva.
Durante los días 9 y 10 de septiembre, se registraron nueve asesinatos y 14 desapariciones forzadas, de las cuales dos personas fueron localizadas. Los hechos violentos, que inicialmente se concentraron en el sector oriente de Culiacán, se extendieron hacia el sur y a municipios cercanos, afectando localidades como Elota, Cosalá y San Ignacio. En respuesta, las autoridades suspendieron las actividades escolares en varios municipios para los días 12 y 13 de septiembre.
La violencia en la región se atribuye a enfrentamientos internos en el Cártel de Sinaloa. La facción liderada por los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán, conocida como Los Chapitos, se enfrenta a otro grupo bajo el mando de Ismael Zambada Sicairos, alias «El Mayito Flaco». La captura de Ismael «El Mayo» Zambada, ocurrida el 25 de julio, ha sido señalada como uno de los factores que detonaron la reciente escalada de violencia en Sinaloa.