- El reto de la educación es ajustarla a realidad
del siglo XXI, destaca Aurelio Nuño Mayer.
Monterrey.- El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño Mayer, dejó en claro que dentro de la reforma educativa, la evaluación es el tema más polémico, pero «no se hizo y no se diseñó para castigar a los maestros».
«Ese no es el objetivo de la evaluación; todo lo contrario. El objetivo de la evaluación educativa es ayudar a los maestros, ayudar a que les vaya mejor, a que sean mejores docentes y que por tanto, a través de lo que enseñan, elevemos la calidad de la educación en el país», explicó.
En el Coloquio Internacional por la Educación Pública, organizado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en lo que fue su primer evento público como titular del ramo, señaló que las evaluaciones permiten saber qué están haciendo bien los maestros «y también lo que hay que mejorar».
Hizo ver que «a los maestros que les vaya bien en la evaluación, les va a ir bien económicamente», pues derivado de la reforma, hay un nuevo sistema de incentivos, y a lo largo del tiempo podrán obtener hasta 180 por ciento más del sueldo que perciben, y en las regiones más lejanas hasta 220 por ciento adicional.
Por ello, insistió, la evaluación no está construida «como se ha querido hacer creer», para afectar a los maestros, sino más bien para ayudarlos, apoyarlos, «para que sean mejores maestros, pero también para que les vaya mejor». Ante maestros de todo el país y de otros países, académicos e intelectuales, el titular de la SEP mencionó que el reto del siglo XXI está en la calidad de la educación «y por ello era fundamental la reforma».
Hizo ver que «la lógica» de las reglas del Sistema Educativo del siglo XX estaba centrada en expandir la cobertura e incorporar a las y los maestros de todo el país, en tanto que ahora están encaminadas a transformarlo para darle calidad a la educación.
Por ello, anotó que su nueva tarea y la instrucción central que recibió del presidente Enrique Peña Nieto, es la implementación de esta reforma transformadora, para crear el sistema público de educación del siglo XXI para México.
Comentó que en la reforma educativa la evaluación «es central», pero no sólo consiste en ello, pues le da a todos los maestros el derecho a la formación profesional y continua, y obliga a la autoridad a darles un acompañamiento de excelencia y calidad.
Otra instrucción es mejorar y consolidar todos los sistemas de enseñanza continua y de formación profesional docente, detalló.
De acuerdo con el titular de la SEP, otro elemento central es el que pone a la escuela en el centro del sistema educativo, mediante el cual se han podido llevar recursos directos a los planteles y fomentar la autonomía de gestión y participación comunitaria de los padres y maestros.
Manifestó que este año se destinaron siete mil 500 pesos a ese programa, que alcanzó un poco más de 20 mil escuelas, es decir, casi 10 por ciento de las que existen en el país.
Un programa más es el de escuelas de tiempo completo, de las cuales, al inicio de la presente administración había seis mil 700; en tanto que en la actualidad hay 23 mil, y será un programa que continuará. El funcionario recordó además el anuncio hecho por el presidente Enrique Peña Nieto en el mensaje con motivo de su Tercer Informe de Gobierno, que será el Programa de Infraestructura Escolar más ambicioso que haya existido en el país.
Explicó que a través de la emisión de bonos educativos, que no es deuda pública, sino que es traer dinero que habrá en el futuro al presente, se financiará la infraestructura escolar.
La emisión de bonos permitirá contar con 50 mil millones de pesos, a lo cual se sumarán los recursos fiscales que se seguirán invirtiendo, lo cual da una cifra de 75 mil millones de pesos y «nos permitirá poner en condiciones de dignidad a la gran mayoría de las escuelas del país».
El secretario de Educación habló también del programa nacional de la enseñanza del inglés, al que consideró fundamental, pues es una de las herramientas centrales para tener éxito profesional «y lo debemos incorporar como una de las prioridades».
Nuño Mayer reconoció que no se trata de una tarea fácil, pero habrá trabajo conjunto para hacer realidad ese programa y dar un paso significativo en la calidad de la enseñanza.
Adicionalmente se hará una revisión profunda de los planes y programas de estudio, y subrayó que con todo ello, llegaremos al año 2018 con una de las mayores transformaciones educativas en el país, puntualizó.