Redacción
Al llevar a cabo su última conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador concluyó un ciclo de seis años en los que utilizó este formato como su principal medio de comunicación con la ciudadanía. Durante más de mil conferencias matutinas, cada una con una duración promedio de dos horas y media, López Obrador mantuvo una comunicación directa con sus seguidores, abordando temas de su administración y respondiendo preguntas de la prensa.
En esta última sesión, López Obrador expresó su satisfacción por el trato respetuoso de su sucesora, Claudia Sheinbaum, y manifestó su felicidad por entregar el cargo a una mujer a la que calificó como «excepcional» y «humanista». Además, destacó que se retira «muy contento» con los logros alcanzados durante su mandato, entre ellos la creación de empleos y la reducción de la pobreza.
Durante su sexenio, López Obrador aseguró que millones de personas salieron de la pobreza, atribuyendo estos resultados a su política de «primero los pobres». Estas cifras han sido respaldadas por datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), que señala una disminución en los índices de pobreza, aunque otros aspectos, como el acceso a la salud, presentan retos pendientes.
En la conferencia también se abordaron temas de coyuntura, como la respuesta a los daños ocasionados por la tormenta tropical John en Acapulco. El presidente detalló las acciones emprendidas por el Gobierno federal, como la entrega de despensas, alimentos y apoyo médico a los afectados, y mencionó que Claudia Sheinbaum visitará la zona afectada en los próximos días para supervisar los esfuerzos de recuperación.
López Obrador destacó, además, la importancia de la austeridad republicana como uno de los pilares de su administración. Reiteró que su gobierno se caracterizó por no permitir la corrupción y por mantener una gestión austera, lo que permitió avanzar en varios frentes, según sus palabras.
Antes de concluir, el presidente firmó dos importantes reformas constitucionales que envió en febrero. La primera de ellas formaliza la incorporación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, consolidando así una institución de seguridad con más de 130,000 elementos y 500 instalaciones construidas. La segunda reforma garantiza los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, lo que, en palabras del mandatario, refleja el compromiso con «el México profundo».
La conferencia cerró con un emotivo momento en el que López Obrador, visiblemente conmovido, escuchó una canción dedicada a su lucha política de 18 años. Esta interpretación formó parte de una sorpresa organizada por su equipo, y estuvo acompañada por músicos y cantantes cercanos al presidente.
Con esta conferencia número 1,438, López Obrador se despidió de un formato que marcó su administración y que, según él mismo, permitió una cercanía única con el pueblo mexicano. La animación que cerró el evento recorrió momentos clave de su trayectoria política, desde sus vínculos con los pueblos indígenas hasta su llegada a la presidencia en 2018, reafirmando su enfoque en servir a los sectores más vulnerables de la sociedad.