Redacción
La canciller mexicana, Alicia Bárcena, reiteró la posición del gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador en relación con el conflicto entre Israel y el grupo Hamás. En lugar de emitir una condena directa a los actos terroristas de Hamás, hizo un llamado a ambas partes involucradas en el conflicto a detener la violencia, incluyendo las respuestas de Israel a los ataques.
En su conferencia matutina de este martes, el presidente López Obrador fue cuestionado sobre su postura en torno a los ataques perpetrados por el grupo islamista Hamás. A pesar de la solicitud de la embajada de Israel en México de una condena más firme a estas agresiones, el mandatario optó por no emitir una condena directa.
El presidente expresó que su gobierno busca evitar la guerra y la violencia, manteniendo una postura pacifista. Afirmó que respetaba la postura de la embajada de Israel en el país, pero destacó que su política exterior se basa en principios que guían su actuar en asuntos internacionales.
En lo que respecta a las cifras de víctimas, hasta la fecha, Israel ha reportado un total de 900 muertos y más de 2,800 heridos como consecuencia del ataque de Hamás ocurrido el sábado. Esta escalada de violencia representa uno de los episodios más graves en el conflicto palestino-israelí en décadas.
Por su parte, Israel declaró el estado de guerra el sábado pasado y ha respondido a los ataques de Hamás con bombardeos sobre la Franja de Gaza, una región densamente poblada con 2.3 millones de habitantes. Estos ataques han resultado en al menos 830 muertos y más de 4,250 heridos en Gaza. Cabe mencionar que esta área ha estado bajo bloqueo israelí desde 2007, cuando Hamás asumió el control del territorio.
