Por Julio A. AGUIRRE
*3de3, de risa.
*Primera piedra,
¿y la última?
*A. del Mazo,
ojalá se decida.
Es menester reír aun sin haber encontrado la felicidad, no sea que muramos sin haber reído nunca. Jean de la Bruyere.
Reacios -la mula no era arisca, la hicieron los palos- a todo lo que dice, hacen y propone la gran mayoría de políticos que arrastra un olor insoportable. Desde que surgió la propuesta ciudadana para implementar la Ley 3de3, pensamos que la idea era justa y necesaria, pero improbable.
Se trata, como bien se sabe, deque todo aspirante ha puesto de elección popular presente su declaración patrimonial, fiscal y de interés. Cuánto tienes y con qué llegas. Demasiado bello -yo agregaría ingenuo- para ser posible.
Pedir cuentas a quien aspira a cargos donde corre el dinero, es pedirle a un prestamista que no te cobre intereses.
¿Hay alguien que sepa de uno, de sólo uno de los políticos que en su declaración de bienes no haya ocultado algo? No ha nacido la persona, creemos, que tenga los pelos de la burra en mano (conocimiento de todos los bienes) para poder creerle a quien pronto se convertirá en nuestro tesorero.
Esta Ley 3de3 es prima hermana del hecho en que el político anuncia con bombos y platillos la colocación de la primera piedra de cierta obra de gran impacto.
El «cuñao» se baña, se peina y ofrece su mejor ángulo para la foto.
Hay un chingo de primeras piedras que han quedado en eso, primera y única piedra porque las dichosas obras pocas veces concluyen.
No importa, pues, la primera piedra. Importa la colocación de la última piedra, digo.
Algo así la Ley 3de3. Le interesa a la sociedad enterarse de cuánto tiene y con qué cuenta el aspirante; sin embargo el interés radica en cuánto tiene y con qué cuenta cuando se van.
Lista grande de políticos que llegan al poder con una mano adelante y otra atrás. Cuando dejan el cargo -para ir en busca de otro- ya se encuentran en la lista delos más ricos del pueblo, del estado o del país.
«Inocentemente» aseguran tener apenas un carrito viejo, una cuenta bancaria con no más de mil pesos; pagan renta y tienen hijos en escuela de gobierno. ¿Y cuándo se van? Resulta que olvidaron unos pequeñitos detalles, como colección de relojes caros, los más caros del mundo; como un montón de alhajas, colección de carros, como algunos yates y jets privados, otros con impresionantes departamentos de lujo, haciendas.
Antes iban al mercadeo a comprar medio kilo de jitomate, una vez que ejercen el cargo público son casi dueños de grandes almacenes. Usaban calzones de costal de azúcar, hoy compran las prendas en las tiendas más prestigiadas del mundo.
NO TIENEN REMEDIO
De vez en cuando di la verdad para que te crean cuando mientes. Jules Renard.
No hay cura para esta enfermedad, la sed de poder y el hambre de dinero no tienen límite.
La Ley 3de3 no sirve para nada, insistimos; pero además ahora los partidos políticos mueven los hilos para que esta -3de3- sea confidencial.
Deberán los aspirantes a cargo de elección popular presentar la lista de sus bienes única y exclusivamente a su partido y una cosa llamada «Código de Ética», la cual será encargada de hacerlas llegar al Instituto Nacional Electoral.
Usted, pueblo, obviamente nunca sabrá con qué llegó y con qué se va.
Estos hombres pecan de inteligentes. Pretenden tapar el sol con un dedo para seguir mintiendo a la sociedad, no captan que terminan haciendo el ridículo y mostrándose como ignorantes.
La riqueza es la fragancia que huele bonito, mientras la pobreza apesta. Ambas, sin embargo, delatan y distinguen a uno de otro.
COMO VA…
Misterio… sugerencias, comentarios y recomendaciones tienen saturado el escritorio de Alfredo del Mazo Maza. El gobernador electo se ha convertido en la empresa más solicitada para buscar empleo.
De acuerdo a lo que pasa en el país y se vive en el Estado de México, entidad con grandes carencias, y que Los Pinos penden de un hilo, Del Mazo Maza está obligado en los primeros 100 días -si es menos tiempo, mejor- a dar un golpe de autoridad que alimente las esperanzas de los mexiquenses y ponga a dudar a los mexicanos con miras al 2018.
Del Mazo Maza debe trabajar bajo su estricto criterio y sentido de responsabilidad; conforme a su obligación y convicción. Cerrar de una vez por todas las puertas del Parque Jurásico.
Hay monstruos que no tienen «llenadero».
Tal vez lloré o tal vez reí/ tal vez gané o tal vez perdí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también amé, puedo seguir hasta el final…A mi manerA.
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