*Candidatos “contreras”.
*Pensión para debatirse.
*Cuando hay para carne…
Por Julio A. AGUIRRE
Vive como si fueras a morir mañana, aprende como si fueras a vivir siempre. Mahatma Gandhi.
Políticamente somos un país lleno de “contreras”. Nuestros partidos y candidatos son envidioso, celosos, tercos e irresponsables. Total falta de congruencia –pocas o ninguna coincidencia-. Tratan de ser únicos, diferentes, triunfadores y salvadores de un país que pesa y vale tanto que cualquier mente brillante que presume tener la solución a todos nuestros males.
El país es de todos los mexicanos y mal halla aquel que pretenda ponerle su fierro con signos y colores partidistas.
Cuando se da la alternancia en el poder, quien ha llegado superando al enemigo de siempre ha intentado cambiar todo, o casi todo. Empezar de nuevo, iniciar de cero no es propio y digno de ninguna mente brillante.
Todo lo que diga y proponga Andrés Manuel López Obrador va en contra de lo dicho y hecho por el Partido Revolucionario Institucional; ya nos pasó con el Partido Acción Nacional que tuvo 12 años para lograr una mejoría y no pasó.
Igualmente nada de lo que exponga y proponga cada uno de los candidatos será bien visto o aceptado por la oposición.
La terquedad y soberbia nos sigue chupando la sangre.
Pendientes más de lo que dice el enemigo que en lo que piensan proponer, los candidatos esperan que uno hable para descalificar y proponer lo contrario. Son personajes que buscan construir destruyendo, ganando aun perdiendo. Venciendo pero no convenciendo.
Es tanta la petulancia de partidos y candidatos capaces de hacer un nuevo camino antes de seguir el que otro ya hizo.
Cada quién habla de la feria según le va en ella, decía la abuela de mi hermano. El hombre fuerte de Morena, Andrés Manuel López Obrador ha prometido que de llegar a la Presidencia de la República quitará las pensiones a los ex presidentes.
El pasado fin de semana el candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional y achichincles que lo secundan, José Antonio Meade anunció que de ganar la silla presidencial mantendrá las pensiones como respeto al Estado de Derecho, además como pago justo por los servicios que brindaron al país.
Viejo pero siempre interesante tema para debatir, más entre la ciudadanía que entre Obrador-Meade. El candidato tricolor se apega a lo establecido mientras Obrador se va a la yugular de quienes han servido al país. El duelo sería entre la clase alta de Meade contra la clase baja de Obrador.
Idea populachera del político tabasqueño sin embargo en elecciones mucho ayuda lo popular tomando en cuenta que somos más, muchos más los huarachudos que los que calzan zapatos de charol. En ese raund Obrador manda a la lona a Meade.
CUANDO HAY PARA CARNE…
El hombre avaricioso está lleno de tremores, y quien vive con temor será siempre un siervo. Quinto Horacio Flaco.
Mientras las instituciones electorales buscan ser parejos con los partidos y candidatos en tiempos electorales, desgraciadamente a quién perjudican es al pueblo. Cuando el pobre tiene para carne resulta que es vigilia.
Suspender programas que benefician al que menos tiene durante la guerra electoral es regla que nunca debió existir.
Los partidos se quejan de desventaja con quienes tienen el control en municipios y estados. Están comprando conciencias. Cambian despensas por el voto y una serie de pretextos donde ese político que tanto bien desea para el prójimo, prefieren que nadie les ofrezca en beneficio meramente partidista.
El poder, de una forma u otra está repartido. Muchos municipios y estados son gobernador por la oposición que hacen justamente eso, acarrear gente, comprar voluntades; que unos sean más poderosos que otros es cierto. De ello la culpa no la tiene el pueblo.
¿Dónde está aquella frase: “Agarra lo que te den y vota por “ya sabes quién?
Justamente en manos del Tribunal Electoral del Estado de México se encuentra la queja presentada por Morena en contra del Salario Rosa.
Oposición rotunda del partido de Obrador a dicho programa. Se ve y siente en desventaja; más allá de la resolución que las autoridades tomen, lo cierto es que Obrador y Morena ya perdieron en el Estado de México el voto de miles de mujeres.
Oponerse en lugar de promover lo que deja dividendos es ir contra corriente.
Tal vez lloré o tal vez reí/ tal vez gané o tal vez perdí/ ahora sé que fui feliz y si lloré también amé, puedo seguir hasta el final…A mi manerA
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